La obesidad se convertirá en la principal causa de mortalidad y enfermedad del siglo XXI, según una experta de la CUN

EP/UNAV
Actualizado: miércoles, 19 mayo 2010 16:05

PAMPLONA, 19 May. (EUROPA PRESS) -

La obesidad se convertirá en la "principal" causa de mortalidad y de morbilidad del siglo XXI lo que conllevará a que se vean "amenazados muchos de los beneficios obtenidos en el ámbito de la salud en décadas pasadas", según sostuvo hoy la doctora Gema Frühbeck, presidenta electa de la Sociedad Europea para el Estudio de la Obesidad y especialista del Departamento de Endocrinología y Nutrición de la Clínica Universidad de Navarra.

La experta, que hoy comparece ante la Comisión Europea de Salud Pública y Seguridad Alimentaria, puso de relieve que "sólo hace medio siglo que la obesidad se introdujo como factor diagnóstico en la Clasificación Internacional de Enfermedades". Desde entonces, expuso en un comunicado, "su prevalencia ha aumentado de tal forma que la obesidad se convertirá en la principal causa de mortalidad del presente siglo".

Así, advirtió de los "peligros" que representa el exceso de peso en el favorecimiento de un alto riesgo de padecer diversas enfermedades, como "patologías cardiacas, hipertensión, diabetes mellitus tipo 2, dislipemia, síndrome metabólico, accidentes cerebrovasculares, osteoartritis, apnea del sueño y algunos tipos de cáncer".

Según dijo, la obesidad también causa "alteranciones psicosociales y otras enfermedades severas asociadas"que inciden en la disminución de la esperanza de vida" y aseguró que la obesidad es actualmente "un problema de salud "infradiagnosticado e infratratado".

Para combatir la obesidad, destacó que los principales organismos internacionales especializados en este ámbito recomiendan perder entre un 5 y un 10 por ciento de peso como principal estrategia para el tratamiento de la obesidad y de sus co-morbilidades. Además, valoró los "numerosos beneficios" para la salud que se derivan de la pérdida de peso intencionada y mantenida en el tiempo.

Por todo esto, la doctora Gema Frühbeck recomendó adquirir "un estilo de vida saludable fundamentado en una dieta equilibrada y en el ejercicio físico, factores que deberían tenerse muy en cuenta".

"La adopción de hábitos de vida saludables, unida a un aumento de la actividad física, consigue mejorar la composición corporal, factor asociado a importantes reducciones de marcadores de la obesidad abdominal, al aumento de la masa musculoesquelética, lo que se traduce en una disminución del riesgo de morbilidad y mortalidad", afirmó.

En opinión de la especialista, los beneficios de la pérdida de peso "no sólo inciden en las enfermedades relacionadas con el exceso de peso o con problemas metabólicos o mecánicos, sino que también afectan a factores relacionados con una mejor calidad de vida, más saludable, así como con los sentimientos de bienestar social y emocional".