- "No caben apoyos sociales, ni inhibiciones, ni cálculos tácticos" afirma el obispo de Bilbao
BILBAO, 15 Ago. (OTR/PRESS) -
El ex presidente de la Conferencia Episcopal y obispo de Bilbao, Ricardo Blázquez, aprovechó hoy la tradicional homilia de la fiesta de la Asunción en la Basílica de Begoña para exigir la desaprición "total e inmediata" del terrorismo, haciendo hincapíe en que frente a esta demanda "no caben apotos sociales, ni inhibiciones, ni cálculos tácticos".
Ante los cientos de fieles que llenaban el conocido templo de la capital vizcaína, Blázquez volvió a expresar un discurso rotundo en contra de la violencia de ETA e indicó además que el terrorismo "cada día se hace más insoportable", por lo que "debe proseguir su deslegitimación histórica, política y ética, de medios y de objetivos". "No podemos soportar que muchos de nuestros conciudadanos sean insultados y amenazados; o se hayan alejado por el agotamiento y la búsqueda de seguridad", señaló Blázquez, para el que la sociedad debe ser "la casa común donde convivan hombres y mujeres que han hecho opciones legítimamente diferentes", dijo.
En este sentido, afirmó que las actuales sociedades son "muy plurales" y, por ello, "con respeto mutuo deben edificar su futuro entre todos y para todos". Según advirtió, "cuanto mayor sea la pluralidad, más debemos cuidar los motivos que nos unen". De este modo, insistió en que la convivencia de "personas y grupos diferentes" requiere, además de una legislación "adecuada", también "magnanimidad, es decir, grandeza de espíritu". "Sobre amenazas e imposiciones injustas -manifestó- no se construye una sociedad digna del hombre".
CADA DIA SE HACE MAS INSOPORTABLE
El obispo de Bilbao exigió que el terrorismo debe "desaparecer", porque "siempre fue inmoral y cada día se hace más insoportable", y planteó que "debe proseguir su deslegitimación histórica, política y ética, de medios y objetivos".
"La actuación conjunta, decidida y perseverante de todos los amigos de la libertad, del respeto a las personas y de la paz sostienen la esperanza de que los esfuerzos alcanzarán pronto su meta", agregó, destacando que, ante el terrorismo, no caben "apoyos sociales, ni inhibiciones, ni cálculos tácticos".
La desaparición de la violencia terrorista significará, en palabras de Blázquez, "un inmenso alivio para las personas amenazadas en su vida, en su libertad y en sus bienes", así como "una mayor vitalidad en todos los órdenes" en el conjunto de la sociedad. Por ello, reivindicó "la desaparición total e inmediata de la violencia" y abogó a "trabajar cada día con renovado vigor por la plena pacificación".
Desde San Sebastián, el obispo Juan María Urirate, en su homolia en la Iglesia del Buen Pastor, llamó a "inmunizarse contra la desesperanza" y lamentó que este año las fiestas donostiarras están surcadas de una tasa mayor de preocupaciones y decpeciones, como la "amenaza del terrorismo, la crisis económica, la tensión política, y el temor a ver conculcados derechos fundamentales".