José Cavero.- Crisis o financiación autonómica

MADRID 9 May. (OTR/PRESS) -

Esas dos parecen, hoy por hoy, las graves asignaturas que tiene sobre la mesa el vicepresidente Solbes, y por consiguiente, el Gobierno en pleno. ¿Por dónde empezar, o por dónde continuar, o cuál será la prioritaria, de estas cuestiones pendientes? En ocasiones, al gobierno le llegan ayudas exteriores con las que es probable que ni siquiera contara. Esta vez ha sido el consejo de Felipe González, en un comentario periodístico de los que suele elaborar sobre cuestiones de actualidad.

González, quien, por cierto, con ocasión de la muerte de su antecesor en el cargo, Calvo Sotelo, ha sido rememorado de manera radicalmente opuesta por dos analistas políticos, Gabriel Albiac y Luis María Ansón, ambos "ácratas de toda la vida", según podrían ser definidos.

Mientras para Albiac el período de González en el Gobierno, 14 años, vino a ser el compendio de todos los males, para Ansón no hay ninguna duda de que se trata del mejor gobernante que ha tenido España desde la recuperación de la Democracia. Pues bien, este González controvertido, y en ese artículo mencionado, sostiene y explica que, ahora mismo, lo urgente es atender y resolver los efectos del frenazo económico, y no la financiación de las autonomías que viene urgida, sobre todo, por la clase política nacionalista catalana.

Indica que disponemos de una ventaja contra las dificultades económicas. El ahorro público obtenido en una buena gestión de la bonanza de los últimos años, aunque no es menos cierto que el impacto de la desaceleración en la actividad relacionada con el cemento y el ladrillo es mayor para nosotros que para otros. Elogia luego que el Gobierno priorice, en esta situación, las inversiones en infraestructuras, en vivienda protegida, en rehabilitación de centros urbanos. Y apremia a que se actúe en inversión generadora de actividad y recuperadora del empleo que se está destruyendo.

Advierte seguidamente que hay un debate abierto sobre financiación autonómica que puede ir contra esas prioridades de esta coyuntura de crisis, señalando que esa nueva financiación producirá incrementos de gasto desvinculados de los efectos de la desaceleración y del empleo que necesitamos recuperar. Sugiere González que los responsables autonómicos y otros responsables políticos, económicos y sociales centren su atención en la recuperación de la actividad para frenar la caída del empleo. Es mejor escalonar ambos frentes y centrarse en lo fundamental, aconseja el expresidente.

Pues bien, ayer el vicepresidente Solbes hizo relación a las dos cuestiones centrales de la economía y de sus preocupaciones: sobre la desaceleración indicó su preocupación porque "se está acelerando su efecto", y sobre la financiación, que se reformará de forma gradual, como fija el Estatuto de Cataluña, y que en agosto pudiera estar listo el pacto con entrada en vigor el año próximo.

En todo caso, el Estado anticipará fondos a las autonomías con más inmigrantes si el modelo no está aún vigente en 2009. Solbes, de momento, quiere definir las líneas maestras, antes de aplicarlas el año que viene, si bien insiste en lo que viene proclamando o advirtiendo el gobierno. Que hay poco dinero más `para los gobiernos autonómicos.

Las cuestiones económicas, por su orden.

José Cavero.