Julia Navarro.- Escaño cero: "4 euros"

MADRID 25 Sep. (OTR/PRESS) - 64 páginas a cuatro euros. Ese es el precio del cudernillo especial editado por el diario Gara en el que se cuentan algunos pormenores de las negociaciones entre el gobierno Zapatero y ETA. La realidad es que el contenido del informe no ha sorprendido a nadie, ni siquiera ha provocado una convulsión en la ciudadania. Y es que no se desvela ningíun secreto al confirmar que el Gobierno negoció con la banda terrorista después del atentado de la T4 de Barajas, en el que murieron dos personas. Lo publicaron varios medios en su día, y lo desmintió el Gobierno diciendo lo mismo que ahora, que no se puede otorgar credibilidad a los terroristas. Pero el caso es que la opinión pública no es que otorgue credibilidad a los terroristas, pero sí a los medios de comunicación que en su día desvelaron que continuaban las conversaciones pese al atentado.

La credibilidad del presidente en este asunto es escasa, por eso a nadie ha sorprendido la confirmación por parte de la banda de esas negociaciones. Además, hace unos días, en una almibarada entrevista que en RNE, le hicieron al presidente, éste dejo entrever que en el futuro continuará intentando la "paz" y todos sabemos en que pueden consistir esos intentos.

No sé si se habrán vendido muchos ejemplares de ese cuadernillo especial, porque ya digo que las revelaciones no han sido extraordinarias. Se han confirmado los días en que se celebraron las citas, y el optimismo del presidente de lograr un acuerdo aún en los peores momentos, cuando la negociación hacía aguas. Por lo demás, en esas sesenta y cuatro páginas no se desvelan los nombres de los negociadores, ni los países que han tenido un papel relevante en el proceso, ni siquiera se da el nombre de la organización internacional especializada en la resolución de conflictos. En realidad, en esas sesenta y cuatro páginas se cuenta menos de lo que han venido contando los peiródicos a lo largo del llamado "proceso". De ahí el relativo impacto de ese informe en la opinión pública que ya tiene descontado que no se decía la verdad desde instancias gubernamentales cuando negaban que hubieran continuado los contactos con ETA después del atentado de Barajas.

Si ETA pensaba que estás escasas revelaciones iban a perturbar la campaña electoral que ya está en marcha, se ha equivocado.

Julia Navarro.