Pedro Calvo Hernando.- El PP y sus palos de ciego

MADRID 12 Dic. (OTR/PRESS) -

Lo que ocurra en las próximas semanas dependerá de la imprevisible actitud del PP y de cuáles sean las fuerzas que prevalezcan en su lucha interna entre la tendencia a la moderación y la que trabaja siempre a favor de la radicalidad derechista, que es la que predomina siempre, como ahora mismo, con el regreso a la ruptura de la unidad antiterrorista, dando palos de ciego una vez más.

Los ejes van a ser la política antiterrorista, tras el atentado de Capbreton, y la territorial. En ambas tiene poco que hacer frente a la política del Gobierno Zapatero, que dispone de un apoyo suficiente entre el resto de las fuerzas políticas y la ciudadanía. Las encuestas electorales son inequívocas. La última es el Pulsómetro de la cadena SER, que este lunes atribuye al PSOE una ventaja de 7,5 puntos sobre el PP, que aumenta por tercera quincena consecutiva y que coloca al partido del presidente Zapatero casi en la mejor posición tras las elecciones generales de 2004. Seguir hablando de empate técnico comienza a ser una monserga irreal.

La tendencia es al aumento de la diferencia entre ambos partidos. De momento, al PP se le ha agotado el argumentario antiterrorista y el presidente Sarkozy colabora involuntariamente en el reforzamiento de Zapatero en esta brutal pugna con los de Rajoy. En otros campos, el descrédito de la política del PP va en aumento, por ejemplo en lo relacionado con su comportamiento en el terreno de las grandes instituciones como el Tribunal Constitucional o el CGPJ, por no mencionar el fracaso absoluto del se rompe España, la conspiración del 11-M o la destrucción de la familia o los grandes valores de la patria.

Ahora se afanan con la ilegalización de ANV, sabiendo que tal medida va a ser instada por el Gobierno de forma inminente. O exigen la derogación de la resolución del Parlamento de mayo de 2005 sobre posible diálogo con ETA en condiciones de no violencia, constándoles que el resto de las fuerzas políticas no están dispuestas a ello. O jalean la devolución de los Presupuestos por el Senado, a sabiendas de que es una cuestión de escasa trascendencia.

Pedro Calvo Hernando