Victoria Lafora.- Largo, e imposible

MADRID 9 Abr. (OTR/PRESS) -

El presidente del Gobierno dijo, hace un año, que el camino para conseguir la desaparición del terrorismo iba a ser largo y difícil. Hoy, tras el último comunicado de ETA publicado en forma de entrevista en Gara, parece cada vez más imposible.

Si éste era el comunicado del que tanto hablaba el Partido Popular, el tan deseado, el que Rodríguez Zapatero esperaba con ansia y había llevado a la fiscalía a ser "condescendiente" con Otegui, la decepción es máxima.

Incluso puede tener dos lecturas. La primera es que, pese a las expectativas suscitadas por el alto el fuego, el proceso esta muy lejos de estar maduro y los terroristas no están dispuestos a canjear paz por presos y dejar que Batasuna, aceptando las reglas de juego de la democracia, participe en las instituciones vascas.

La segunda es que todas las acusaciones del PP sobre las cesiones a ETA y su entorno no eran ciertas porque ni la prisión atenuada al sanguinario De Juana, ni la absolución de Otegi, eran las exigencias de la banda para entregar las armas.

Al margen de la contienda política entre los dos partidos y de la utilización de la lucha contra el terrorismo por parte del principal partido de la oposición, lo verdaderamente grave es que todo sigue igual, que siguen amenazando, que advierten sobre la ausencia de Batasuna en las elecciones y lo consideran el fracaso del proyecto.

¿Pero que proyecto ni que narices? Aquí no hay más proyecto que el respeto a la Constitución, a la democracia y a las libertades. Nada se va a conseguir con la lucha armada y sólo les queda entregar las armas. Lo demás es palabrería y mientras no lo entiendan no hay nada que hacer.

Atascados en las reivindicaciones de la territorialidad y el derecho a decidir pretenden conseguir por la vía de la amenaza lo que no han conseguido en los años luctuosos del tiro en la nuca. El único avance de este nuevo texto doctrinal de los asesinos es comunicar a los demócratas que si nos portamos bien y les damos lo que quieren ya no van a matar más y puede que su última "lección" del atentado de Barajas no se repita; aunque, eso sí, tenían a los del 'comando Donosti' localizando posibles víctimas.

Terminan los etarras diciendo que cada vez ven con más posibilidades conseguir la independencia pero que para ello tendrán que "luchar mucho". Más claro imposible: de momento las cosas no pintan nada bien y sigue siendo la eficacia policial la única respuesta.

Victoria Lafora