MADRID 22 Ene. (OTR/PRESS) -
El enganche de Carmen Martínez-Bordiú a las exclusivas no tiene precio. La "nietísima" y José Campos protagonizan esta semana la portada de "Hola", la pareja agota con el paso de los años los lugares en los que hacer sus "scoop", será por eso que esta vez se han ido al Ártico, vamos, a la vuelta de la esquina. Las fotos no tienen desperdicio empezando por la portada en la que vemos al matrimonio embutidos en monos especiales para combatir el frío, con esta imagen bien podría ficharles gas butano para protagonizar su próxima campaña, el naranja chillón del atuendo y sus caras congeladas a 20 grados bajo cero son algo a tener en cuenta para el análisis de rigor.
Como no tienen embarazo que anunciar, ni separación a la vista, ni desengaño alguno que mencionar, Carmen y José reconocen en la entrevista que este ha sido un año difícil, no es de extrañar si recordamos que salió más de una mujer encabezadas por María de Mora, que decían haber sido amantes del cántabro cuando este ya estaba matrimoniado con la Bordiú.
Infidelidad o no, Carmen se lió la manta a la cabeza e hizo la vista gorda, ella sigue al pie de la letra el refrán "ande yo caliente, ríase la gente", por eso no perdió la baza en hablar del asunto en la tele, se especuló con tríos amatorios, con cuernos y con una traición imperdonable en la misma noche de boda.
"Hola" le dedica 12 páginas al reportaje de la pareja, justifican su viaje a los fiordos argumentando que este ha sido un año difícil y que necesitaban aislarse para recuperar su intimidad, y digo yo que, ¿para eso se llevan todo un equipo de producción y un fotógrafo que ha captado de maravilla "los momentos más íntimos" de Carmen y de Campos?, sentido del humor no les falta, perdón, se me olvidaba que eso también tiene un precio.
Los reportajes a toda página y las entrevistas televisivas habían sido hasta ahora su fuerte, incluso la vimos como concursante en "Mira quien baila" y la verdad es que Carmen se esforzaba en aprender las coreografías. Su talento para el baile lo ponemos en cuarentena porque quedó claro que las piruetas tampoco son su fuerte. Hace unos meses que estrenaba sus memorias bajo el titulo "Cumple años, gana vida", en las que analizaba su existencia salpicando en esas páginas titulares que sabía que le abrirían las puertas de cualquier plató.
Como colofón acudió al programa en el que uno se pone en contacto con sus muertos a través de una médium que dicen que es un "crack" en el asunto, no sé yo, por mi parte sigo siendo muy escéptica en estos temas, sobre todo cuando forman parte de un show televisivo en el que los minutos para dar titulares están contados y hay que amortizar la audiencia. Si lo vieron recordarán que Carmen se emocionó y hasta derramó alguna lágrima cuando supuestamente su hijo Fran que murió en 1984 le lanzaba mensajes a través de Anne Germain. La fe es libre pero los focos supongo que condicionan las reacciones ¿no les parece?