Screening Room: un dispositivo para ver cine en casa el día del estreno en salas

Recurso cine
COPYLEFT (PIXABAY)
Actualizado: jueves, 17 marzo 2016 15:07

   MADRID, 17 Mar. (EDIZIONES/Portaltic) -

Películas de cine en casa, el día del estreno, de manera legal. Es el sueño de muchos y una de las peticiones que los usuarios llevan más tiempo haciendo a la industria. Gracias a Sean Parker, el cofundador de Napster, podría ser posible. Este visionario de la industria del entretenimiento trabaja en un peculiar dispositivo, The Screening Room, que podría cambiarlo todo.

   El objetivo de su proyecto es que los aficionados al cine puedan disfrutar los estrenos desde casa, el mismo día de la llegada de una película a las salas. La idea de The Screening Room es crear un sistema de distribución completamente legal para casa, que eliminaría el tiempo de espera entre "ventanas de distribución". Además, sus creadores aseguran que contaría con un sistema estricto y seguro antipirateria, explica Variety, que impediría que los usuarios creasen copias digitales y las volcasen en Internet.

   Con este sistema, aquellos que quisiesen ver una película de estreno, pero no salir de casa, tendrían la respuesta. Pero disfrutar los estrenos en casa no saldrá precisamente barato. La idea es vender un dispositivo especial para ver las películas y, después, cobrar por los alquileres, tratando de compensar los visionados en grupo. Es decir: todo será mucho más caro que ir a ver de forma individual una película al cine.

El decodificador de señal para utilizar The Screening Room costará unos 150 dólares. Y eso no es todo, por cada película habrá que pagar 50 dólares y el usuario sólo podrá verla durante 48h después de haber pagado, de forma similar a los actuales videoclubs online.

La explicación de estos precios es que The Screening Room no solo ha sido ideado para cambiar el sistema y adaptarse a la coyuntura actual, sino también para contentar a todos los actores actualmente involucrados en la industria: desde las productoras, a las distribuidoras, pasando por los negocios físicos que perderían clientes. De esta forma, de los 50 dólares por alquiler, según explica la compañía, el 40% (20 dólares) irán a las salas de cine y el 20% (10 dólares) a las compañías cinematográficas.

   La idea, sin duda, es una buena noticia. Es indicativo, al menos, de que hay quien se preocupa en Hollywood por que las cosas no sigan como hasta ahora; que existe conciencia de que no se puede obligar a un usuario a ver las películas cómo y cuando quiera una compañía, porque la piratería tiene las manos muy largas y es complicado mantener el control. Antes de seguir asumiendo pérdidas, ¿no será mejor dar a los usuarios las alternativas legales para que paguen por lo que quieren ver?

Sin embargo, los precios parecen demasiado altos para convencer al público. ¿50 euros por ver una película en casa? ¿Quién se juntaría con 5 amigos para que esto le sea rentable en casa, en lugar de ir al cine y evitar, además, tener que comprar un dispositivo que cuesta 150 dólares?

Además, Hollywood está dividido al respecto. No gusta a todos los directores un nuevo modelo de negocio que cambiaría el actual sistema de estreno, salto al mercado de alquiler, de pago por visión, de teles de pago... Es decir ese sistema de "ventanas de explotación" que irrita tanto a los espectadores. La iniciativa ya cuenta con el apoyo de Steven Spielberg, Martin Scorsese, Peter Jackson o J.J. Abrams, entre otros. Pero no todos lo apoyan: James Cameron, Christoper Nolan o Jon Landau están en contra de este proyecto.