Programar es cosa de niños: El verano del código

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Europa Press PortalTIC
Actualizado: martes, 19 julio 2016 9:54

Juguetes y software

Programar es cosa de niños: El verano del código

   MADRID, 19 Jul. (EDIZIONES/Portaltic) -

   Las vacaciones de verano no deberían ser excusa para dejar de aprender o para poner el cerebro en ‘standby’ hasta septiembre. Los cuadernillos de vacaciones llevan adornando estanterías en supermercados y librerías desde hace mucho tiempo, pero ahora no están solos. Hay otras formas de aprender --y otras cosas que aprender-- más allá de las matemáticas, el conocimiento del medio y la literatura. Enseñar a programar a los más pequeños se está convirtiendo en una de las misiones de todas las grandes compañías tecnológicas. Y el verano puede ser un buen momento para empezar a ponerse con ello.

   La última en subirse al carro ha sido Apple, con su nueva aplicación para iPad que pretende que los niños aprendan y se acerquen al código desde pequeños. Pero los de Cupertino no son los primeros ni los más importantes: la programación o el conocimiento del código preocupa a miles de expertos que, desde hace años, trabajan en que esto deje de ser un campo exclusivo de adultos. “Todos en este país deberían aprender cómo programar una computadora, porque eso te enseña a pensar”, dijo Steve Jobs en una de sus míticas presentaciones.

   DASH Y DOT

   Dash es un robot azul con un gran ojo en su parte frontal que se controla a través de un dispositivo móvil (tablet o smartphone). Dash gira, emite sonidos o se desplaza según las órdenes de los niños a través de las aplicaciones. Además, puede interactuar con otros robots como él. "Queríamos darle una forma que los niños puedan imaginar ser cualquier cosa en su propio mundo: A veces puede ser un monstruo, o un animal, o un fantasma. Lo que se imaginan que sea”, explica el director ejecutivo de la idea, Vikas Gupta, a The Guardian.

Dash y Dot, su compañero de viaje, cuentan con cuatro aplicaciones para poder disfrutar del juguete: Go, Path, Wonder y Blocky. Diferentes niveles adaptados a las edades a través de las cuales los niños pueden avanzar en su aprendizaje y en su conocimiento de la programación. "Para los niños, la codificación es una herramienta que le da la capacidad de ver el mundo de manera muy diferente”, explica Gupta.

   LEGO WE DO 2.0

   Al cumplir una edad ya no interesan tanto las luces de colores, los movimientos infantiles, los gusanos y robots que se arrastran por el suelo. Pero el aprendizaje es largo y el camino hasta el saber aún tiene muchas etapas --y aplicaciones que permiten superarlas--. LEGO presentó a principios de año WeDo 2.0, un kit de robótica para estudiantes de primaria que cuenta con más de 120 elementos para crear sus propias criaturas y cuenta con conexión Bluetooth y compatibilidad con dispositivos móviles, para que los niños puedan dar órdenes y hacer que sus robots logren moverse de verdad.

   SCRATCH

   El Instituto Tecnológico de Massachusetts lanzó hace más de diez años, en 2003, Scratch, un software de programación que permite miles de posibilidades. Un proyecto que se desarrollaba desde 1997 y que ahora se ha convertido en un referente para la relación entre el código y los más pequeños. Pensado para niños de entre 8 y 16 años pero válido para personas de todas las edades.

De hecho, explican, Scratch es utilizado por empresas y compañías que pretenden acercarse a la programación sin complicaciones. Scratch permite que el usuario decida qué quiere hacer entre miles de posibilidades: avanzar hacia delante, bailar, girar a la izquierda, saludar, emitir un mensaje. Un tutorial con detalles para que empezar resulte fácil y, una vez aprendido, casi sin límites. El software es gratuito y cuenta con una comunidad online donde pueden subirse los proyectos: más de 12 millones realizados, de los que poder tomar ideas.

   CODE.ORG

   Los responsables de las compañías más punteras de tecnología lo tienen claro: hay que programar. Todos ellos coinciden en la programación desde pequeños: Bill Gates, Mark Zuckerberg o Jack Dorsey, entre otros. Así lo mostró un vídeo lanzado por Code.org, una organización si ánimo de lucro que pretende difundir la programación como parte de la educación básica de los jóvenes y que cuenta con el apoyo de los principales gigantes de la tecnología mundial. Code.org tiene cursos en más de 45 idiomas y funciona en más de 180 países y su proyecto 'Hora del Código' cuenta con diez millones de alumnos, de los cuales el 50% son mujeres.

   Cada vez son más las opciones para aprender programación desde los primeros años. Apple se sumó a la tendencia con Swift Playground, anunciada en su última conferencia. Se trata de una aplicación para iPad que pretende acercar cobnocimientos de programación y robótica para todos los públicos a través de Swift, el lenguaje de programación de Apple. Google cuenta con la iniciativa 'Made with Code', pensada especialmente para las niñas y en colaboración con la Asociación Americana de Mujeres Universitarias para fomentar el interés de las ciencias computacionales entre las chicas. Bajo el eslogan "Las cosas que amas están hechas con código", el sitio incluye posibilidad de diseñar GIFs, emojis o aplicaciones a través de un software sencillo.

Como Apple y Google, grandes multicionales de la talla de Fisher Price también han pensado incorporar el código en los juguetes para los más pequeños. En la pasada edición del CES, la conocida marca de juguetes presentó Code-a-Pillar, un gusano con segmentos y colores que permite asignar órdenes y acciones para que los niños de entre 2 y 8 años puedan jugar a la vez que adquieren fundamentos de informática y programación.

   Programar está de moda y Kickstarter es buen escaparate de ello. La plataforma de crowdfunding ha sido aliada, durante los últimos meses, del éxito de decenas de proyectos con el código como protagonista. Ejemplos como Cubetto, un pequeño robot de madera para aprender las nociones básicas del lenguaje, consiguió más de millon y medio de dólares de financiación para sacar adelante el proyecto. Un éxito rotundo que logró hacer el cubo realidad y que comenzará a llegar a las casas a finales de este verano. Como Cubetto, Codey Bot, otro robot-juguete para programar que aterrizó en Kickstarter hace tan sólo unos meses y logró casi 200.000 dólares, se hizo realidad y comenzará a llegar a las casas de todos sus financiadores a partir de agosto de 2016.

   Programar para aprender a comprender el mundo es el mensaje que Code.org lanzó a través de un vídeo donde reúne a creadores de importantes plataformas. “El primer programa que escribí preguntaba cuál era tu color favorito o cuántos años tienes” explica Drew Houston, creador de Dropbox. Algo divertido para ellos y para su familia, nada más. Así lo explica Jack Dorsey: “Aprender a programar no como un deseo de aprender todo sobre la informática o tratar de dominar la disciplina sino como querer hacer algo sencillo. Quise hacer algo que fuera divertido para mí y mis hermanas”. Ser capaz de tener una idea y ver que se hace realidad con apretar un botón.

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