Análisis Dragon Ball Xenoverse: la mejor entrega de la saga en años

Actualizado: viernes, 27 febrero 2015 14:05
icle class="NormalTextoNoticia" id="CuerpoNoticia" itemprop="articleBody">

MADRID, 24 Feb. (Carlos Hergueta/Portaltic) -

   Hasta hace muy pocos días, había perdido el interés por los videojuegos de Dragon Ball, cansado de entregas que no venían a aportar demasiado y experiencias especialmente mediocres, como la entrega para Kinect o Battle of Z, que al tercer combate ya había conseguido aburrirme. Dragon Ball Xenoverse, un título que está claro que no esperaba con las ganas que se merecía, me ha devuelto las ganas de pelea. La última adaptación de la obra de Akira Toriyama es un divertido título de lucha con toques de aventura que ofrece un interesante giro a los acontecimientos de sobra conocidos.

   En Xenoverse debemos derrotar a Vegeta, Napa, Freezer, Célula o Boo una vez más, sí, pero no como siempre. Como si de la película Las posibles vidas de mr. Nobody se tratase, pequeñas alteraciones están teniendo lugar en las aventuras ya vividas en el universo Dragon Ball, creando nuevas líneas temporales. ¿Qué pasaría si Raditz se hubiese zafado de Goku cuando Piccolo le lanzó el Makankosappo, por ejemplo?

   Ante semejante panorama, nosotros encarnamos a un nuevo guerrero, elegido por el dragón Shenron para formar parte de la Patrulla del tiempo, encargada de enmendar estas alteraciones y descubrir quién está detrás. Trunks, con experiencia en estas lides, será nuestro guía en la aventura. Este planteamiento introduce nuevos personajes y consigue despertar un interés completamente fresco por la historia de Goku y compañía, entre secuencias generadas por el motor del juego y algunas dibujadas de forma tradicional, al estilo del anime original. Xenoverse es conciso en este sentido y no nos obliga a ver largas escenas ya de sobra conocidas, sino que cuando no hay nada nuevo que contar, nos mete pronto en harina, lo que es de agradecer.

   Si la historia es uno de los puntos más interesantes del juego, también resulta muy atractivo crear nuestro propio guerrero, eligiendo entre varias razas (humano, saiyan, namekiano, monstruo tipo Boo, alienígena de la raza de Freezer, etc) y eligiendo complexión, cara, peinado, color de ropa, etc. Después, podemos ir mejorando sus poderes y usar nuevas ropas. No ofrece tantas posibilidades como un complejo juego de rol, pero sí las suficientes como para que construyamos nuestro luchador soñado en el universo de Dragon Ball. Cada raza tiene su peculiaridad y condicionará el balance general del luchador, además de su aspecto físico.

LIBERTAD PARA LUCHAR

   En el campo de batalla, Dragon Ball Xenoverse utiliza algunos elementos de anteriores entregas en un desarrollo abierto al estilo Tenkaichi, con múltiples personajes simultáneos. Podemos fijar el blanco en uno de ellos y cambiar con el stick derecho para dirigir nuestros ataques.

   El sistema de control es lo suficientemente versátil como para poner a prueba nuestra capacidad de memorizar botones y nuestros reflejos, con dos botones de ataques para combos, super-combos predefinidos, además de ataques de ondas de energía leves, poderosos y super-poderosos. También podemos usar cápsulas (de energía, ki, etc) realizar agarres, bloquear, teletransportarnos y subir, bajar y acelerar mientras volamos.

   Empezar a combatir es sencillo, pero no así hacerlo con soltura. Este es uno de esos juegos que premia mucho, muchísimo, los reflejos adquiridos y un jugador novato no sabrá de dónde le vienen las hostias si se enfrenta a uno experimentado debido a las muchas combinaciones de botones. Aquí todos los botones del mando tienen una función clave en la batalla.

   La curva de aprendizaje resulta realmente satisfactoria y, poco a poco, nos va embargando la sensación de ser uno de esos guerreros todopoderosos que estamos acostumbrados a ver en la televisión, moviéndonos a la velocidad del rayo mientras esquivamos y lanzamos poderosos ataques. Afortunadamente, no reina la sensación de caos de la anterior entrega, sino la de estar ahí, siendo parte de las batallas que tan bien conocemos, y controlando la situación.

Previa YoutubeCargando el vídeo....

UN MUNDO POR DESCUBRIR

   El modo historia es un elemento más dentro de Dragon Ball Xenoverse. El juego prescinde de menús y en lugar de eso nos permite movernos en tercera persona por la ciudad Toki Toki, dividida en tres sectores, que agrandes rasgos esconden: 1) la historia principal y los torneos; 2) las tiendas; y 3) misiones secundarias y combates sueltos. A veces resulta un poco tedioso tener que andar de un sitio para otro para seleccionar una misión y uno se pregunta si no sería más práctico moverse por menús; sin embargo, desplazarnos por el escenario, ver correr a nuestro avatar, hablar con personajes y entrar en tiendas contribuye a crear la ilusión de que somos un nuevo guerrero en el mundo de Dragon Ball.

   Aprovecharé este punto para comentar el apartado técnico, a propósito de la construcción de la ciudad. Las tres secciones están divididas y para movernos de unas otras a otras debemos atravesar una puerta, aguantando no demasiado largos, pero sí molestos, tiempos de carga. Teniendo en cuenta lo pequeña que es Toki Toki y pocos pocos detalles que hay, resulta incomprensible. Al margen de eso, la construcción de los personajes y los escenarios mantienen la línea ya vista en anteriores entregas, con una nula capacidad de sorpresa. Es una pena que no se haya aprovechado la mayor potencia de Xbox One y PS4, pero el resultado es bueno, todo se mueve fluido y la fidelidad con la obra original es absoluta.

   Volviendo a Toki Toki, la ciudad funciona como un MMO y podemos elegir si queremos desplazarnos en solitario, en cuyo caso nos encontramos con personajes no jugables basados en los avatares de otros, que nos pueden retar. También podemos optar por jugar contectados. Podemos crear equipos de tres luchadores para participar en misiones secundarias, apuntarnos al torneo mundial de artes marciales, participar en combates de hasta seis, etc. Además, fuera de las patrullas del tiempo, en otros combates o torneos podemos seleccionar a los personajes del universo Dragon Ball que vamos desbloqueando. Faltan algunos populares de las ovas, pero el elenco es amplio con una plantilla de 47 luchadores.

   Resulta capital ir aparcando el modo historia para realizar tareas de este tipo con las que logramos puntos para subir de nivel y mejorar nuestros atributos, encontramos objetos, dinero y nos hacemos con icónicas prendas de ropa para nuestro avatar (como el uniforme de Raditz, la capa de Piccolo o la túnica de Pilaf).

   También podemos conseguir nuevas técnicas, "genéricas" o de sobra conocidas, comprándolas o aprendiéndolas de guerreros de la talla de Piccolo o Vegeta, quienes nos lanzan retos si les pedimos que se conviertan en nuestros maestros. Además, aunque el grueso de las misiones secundarias son los combates, entre batalla y batalla podemos movernos por libertad por los escenarios, usar el visor de los guerreros del espacio para encontrar objetos e incluso buscar las bolas de dragón. No creo que se me olvide la primera vez que sobrevolé Namek con dos bolas bajo los brazos de mi personaje.

CONCLUSIÓN

   Dragon Ball Xenoverse no solo es un soplo de aire fresco para el desgastado universo de juegos basados en esta licencia por su componente aventurero, sino también un título de lucha muy divertido y una experiencia que nos hace vivir desde otra perspectiva las batallas que hemos visto en infinidad de ocasiones. En general el elenco de personajes y la cantidad de objetos y atuendos satisfarán a los fans de la obra de Toriyama. Estos elementos, unidos a la sensación de crear, entrenar y personalizar nuestro propio guerrero, con muchas misiones para superar y un completo componente online, dan forma a un juego de lucha que realmente merece la pena.

Ficha:

Plataformas: PC, Xbox One, Xbox 360, PS3 y PS4 (versión analizada)
Precio: Entre 61,99 y 71,99 euros
Fabricante: Bandai namco
PEGI: 12
Idioma: Voces en inglés, textos en español
Lanzamiento: 27/02/2015