Resident Evil Zero HD Remaster (análisis): La génesis de la terrorífica leyenda

Actualizado: lunes, 18 enero 2016 17:15

   MADRID, 18 Ene. (David Soriano/Portaltic) -

   Resident Evil Zero HD Remaster (incluido en el recopilatorio Resident Evil Origins Collection, disponible el 22 de enero) viene a llenar el vacío significativo de buenos juegos de terror que atravesamos en los últimos tiempos, con unas simples obras que mencionar y mucho ejemplo en el que lo que de verdad daba pánico era la calidad del producto. Este juego no es sino la resurrección de un clásico imperecedero que se antoja como imprescindible sobre todo para aquellos que en su día no pudieran disfrutarlo en su plataforma nativa.

   El ejemplar del que hoy hablamos es otro caso más del nuevo modelo de negocio que las distintas editoras están llevando a cabo para aprovechar esos huecos en el calendario de lanzamientos y de este modo sacar un beneficio aún mayor a proyectos poco costosos de traer de vuelta. Ya lo vimos el pasado año con el Resident Evil HD Remaster, con quien comparte orígenes -ambos fueron lanzados en 2002 para Game Cube- y motor gráfico. Tal son sus similitudes y forma en la que ambos productos conectan, que formarán parte de un recopilatorio en formato físico que se lanzará el 22 de enero.

   Volviendo a Resident Evil Zero HD Remaster, tiene una peculiaridad que lo vuelve único; está basado en una historia completamente original para cuando se puso a la venta. Tal y como su numeración indica, estamos ante un título que sirve como prólogo para absolutamente todo lo que hemos visto después para una saga tan prolífica como Resident Evil. Para ser más exactos, trata de los hechos ocurridos en la ficticia Raccoon City el día antes de lo que se contaba en el Resident Evil original del 96.

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   La trama cuenta con dos personajes claramente diferenciados. Por un lado, está la novata agente del cuerpo STARS Rebecca Chambers. Por otro, un ex-marine condenado a muerte y fugado posteriormente llamado Billy Coen. Ambos se encontrarán a bordo del tren Ecliptic Express, en una localización que ha pasado a la historia de los juegos de terror. Mientras que ella es frágil físicamente hablando, él es un portento físico. Mientras que ella puede crear elementos curativos recogiendo sus ingredientes, él puede quemar a sus enemigos. Mientras que ella es una experta en armas de fuego, él hace mucho daño con armas cuerpo a cuerpo. Así funciona Resident Evil Zero HD Remaster, con un desdoblamiento de clases del que han bebido muchas entregas lanzadas a posteriori.

   La inclusión de dos protagonistas no sirve únicamente para dar mayor empaque a la trama, sino que tiene una trascendencia crucial en lo referente a las mecánicas de juego. Todas las secciones jugables están diseñadas teniendo en cuenta que ambos personajes son plenamente controlables, por lo que es decisión del usuario cómo aprovechar las fortalezas de cada personaje según el momento. Además, el propio diseño de niveles se ha trabajado a conciencia atendiendo a las posibilidades de cambiar de avatar, ya que no serán pocos los rompecabezas en los que debemos ir simultaneando el personaje activo para acometer las acciones necesarias para continuar. Todo ello sin pasar por alto la barra de salud de ambos, pues si uno de los dos muere, la partida acaba y vuelta a empezar.

   Este cooperativo controlado por la IA nos permite realizar ciertas acciones como compartir equipo entre ambos, ya que el inventario de los dos está disponible para intercambios. Además, hay disponibles una serie de comandos con los que elegir la táctica que más se ajusta al momentum de la partida: disparar automáticamente, seguirnos o permanecer en una estancia determinada. Por si fuera poco, hay un buen puñado de vestimentas alternativas con las que dar a nuestros personajes nuestro toque personal y único.

   Quitando esta característica a nivel jugable del doble control de personaje, que se terminó por ver más adelante en los títulos de la subsaga Outbreak, Resident Evil Zero HD Remaster tiene casi exactamente los mismos ingredientes que llevaron al original a ser nombrado "survival horror", pese a que hubo anteriores exponentes. Estamos hablando por supuesto de una combinación entre distintos seres sobrenaturales que intentarán acabar con nuestra vida virtual junto a la constante sensación de asfixia material, de que los recursos son tan sumamente escasos que hay que administrar todo con cuentagotas.

   Generalmente, una de las lacras que tiene el modelo de la remasterización es que se limita a trasladar cada línea de código del original a una nueva plataforma, sin arriesgarse con modificaciones y teniendo como resultado un producto casi idéntico al anterior en el que las mejoras gráficas rara vez justifican una nueva compra. Por suerte, este no es el caso con nuestro juego de hoy, pues se ha añadido el nuevo modo Wesker, un recorrido alternativo con el emblemático personaje de la saga demostrando sus poderes sobrenaturales adquiridos en Resident Evil 5. Rompe la cronología, sí. Pero como modo alternativo que es, es realmente divertido de jugar y supone un alivio comparado con un recorrido normal además de ser un soplo de aire fresco para una fórmula tan clásica que pocos esperábamos que aceptara algo nuevo. Por contra, podría haber sido el juego perfecto para incluir cooperativo online.

   Las mejoras son las esperadas teniendo en cuenta que ya hace un año se trajo de vuelta a su hermano Resident Evil HD Remaster. La resolución ha sido incrementada hasta los 1080p para consolas de nueva generación, ganándose así su coletilla de HD. Incorpora igualmente alternativas para el ratio de pantalla en 16:9 o 4:3 y además añade sonido Dolby 5.1. En lo referente a lo puramente visual, se observa una mejora en los modelados de algunos personajes y enemigos. Esto se ejemplifica a la perfección en las escenas de vídeo generadas con el motor del juego, no así en las CGI pre-grabadas, que se resienten del paso del tiempo y se ven demasiado pixeladas.

   El principal problema de Resident Evil Zero HD Remaster es su manejo. A pesar de que incluye una configuración de botones alternativa -y más centrada a los usuarios de los nuevos tiempos-, el propio juego está ciertamente desfasado en este sentido como para aportar una solución placentera hoy en día. Los escenarios pre-renderizados en 2D sobre los que el personaje 3D se mueve tampoco ayuda a esto, debido a los constantes cambios de ángulo que acaban por desorientar al jugador.

CONCLUSIÓN

   Resident Evil Zero, entendido como concepto, es un auténtico imprescindible tanto del género como del legado de Game Cube. Dadas las peculiaridades en su concepto de prólogo original así como su jugabilidad dual es un producto totalmente recomendado tanto para aquellos que en su día no pudieron disfrutarlo como los que quieren revivir los últimos momentos de gloria antes de que la saga cambiase de estilo y para muchos, todo se fuese al garete.

   Si como producto original merece la pena, los añadidos jugables justifican su compra, ya que aportan algo nuevo a la fórmula de 2002 y el modo Wesker es realmente divertido y disfrutable. Su aspecto visual resiste en líneas generales muy bien el paso del tiempo (fue un total adelantado a su época) y el sonido envolvente lo complementa a la perfección.