Dice que el turismo cultural, el servicio asistencial y educativo y la Constitución Española justifican la exención para la Iglesia
MADRID, 31 May. (EUROPA PRESS) -
El profesor de Derecho Tributario de la Universidad CEU San Pablo, Juan Ignacio Gorospe, ha explicado que la Iglesia Católica sí paga el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) por aquellas explotaciones comerciales que no estén relacionadas con su finalidad específica, como por ejemplo la venta de dulces en los conventos de clausura.
"La Iglesia sí tributa por aquellas explotaciones comerciales que no estén afectadas a su finalidad específica, por ejemplo las madres contemplativas que venden determinados productos de repostería o un parking que tenga explotado un centro religioso", ha informado a Europa Press.
Asimismo, ha recordado una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Galicia de 2003 que distingue dentro de una fundación benéfico-docente el espacio que se destina a casa de fe religiosa y a impartir enseñanza en régimen de concierto --exento de pagar el IBI--
y la parte destinada a enseñanza privada y residencia universitaria --gravada--.
Además, en cuanto a los monumentos de la Iglesia en los que se cobra una entrada para visitar un museo o una exposición, ha destacado que ya solo por ser un edificio histórico, en caso de serlo, no pagaría con independencia de que se obtengan ingresos, como en el caso del Museo del Prado.
De hecho, ha añadido que en el caso de los edificios eclesiásticos, lo que se pueda cobrar por la entrada es "muy bajo" y, por tanto, "inferior a los costes de mantenimiento de esos edificios o de rehabilitación de los mismos". De esta forma, ha indicado que no podría considerarse explotación económica como tal porque estaría afectado a su finalidad específica.
Por otra parte, Gorospe ha destacado que la exención del IBI para la Iglesia, además de estar recogida en la legislación española, se justifica en el artículo 16 de la Constitución Española que establece la libertad religiosa y de culto; y en el "importante" servicio que presta la Iglesia a nivel pastoral, litúrgico, y educativo y asistencial --casas de acogida, comedores sociales, labor para la consecución de empleo de personas que están en paro--.
Igualmente, ha subrayado la necesidad de los ingresos que se obtienen del turismo cultural gracias a los bienes que forman parte o están relacionados con la Iglesia Católica como la Catedral de Burgos, la de Sevilla, el Camino de Santiago o la Semana Santa de Sevilla que, según ha apuntado, supone "unos 240 millones de euros de recaudación para la ciudad".
"No sólo es el coste que ahorra al Estado sino también los ingresos que genera a través de ese patrimonio cultural. Hay gente que visita pueblos exclusivamente para ver la Iglesia de ese pueblo. Eso supone un enriquecimiento para la economía de España", ha remarcado.
A TODAS O A NINGUNA
Gorospe ha apostado por que si la exención del IBI se suprime, "se suprima para todo tipo de bienes, no sólo para la Iglesia" y se aplique así a "todas las entidades sin fines lucrativos, fundaciones, ONGD, federaciones deportivas --exentas de pagarlo por la Ley de Mecenazgo de 2002-- y a los bienes integrantes del patrimonio histórico español, los edificios públicos destinados a cuarteles, comisarías y colegios, entre otros --exentos por la Ley de Haciendas Locales--.
En esta línea, ha explicado que, si el acuerdo con la Santa Sede sólo incluía a los templos destinados al culto, residencias de obispos y sacerdotes, las oficinas parroquiales, seminarios de formación, universidades eclesiásticas, congregaciones y conventos, la legislación española posterior a 1979 amplía la lista hasta el punto de ser, a su juicio, "demasiado amplia".
En cualquier caso, considera que la exención "tiene mucha más justificación" para los edificios destinados al culto y que si hay que empezar a recortarla, se haga comenzando por las que menos función social cumplan. "No tiene mucho sentido que se le exija a la Iglesia (pagar el IBI) y no al hotel Ritz", ha puntualizado, al tiempo que ha señalado que "se está tergiversando y sesgando demasiado la cuestión".
