Investigadores en Artes Visuales advierten de que el decreto que equipara enseñanzas artísticas "genera conflicto"

La ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría
La ministra de Educación y Formación Profesional, Pilar Alegría - EUROPA PRESS
Publicado: miércoles, 22 marzo 2023 12:43

   MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

   La Asociación Nacional de Investigadores en Artes Visuales (ANIAV) han expresado sus dudas sobre el Anteproyecto de Ley del Ministerio de Educación que equipara las enseñanzas artísticas no universitarias a las universitarias por entender que "lejos de resolver el encaje de las disciplinas artísticas en el sistema universitario, genera un conflicto y confusión en el sistema educativo español".

   La organización ha recorado que, desde hace tiempo, se entiende la necesidad de que estudios y disciplinas como la danza, teatro o música tengan su cobertura en las instituciones universitarias, como ocurre en algunos países europeos y en el ámbito internacional.

   En el caso de las artes visuales, denominación contemporánea de la expresión artística en artes plásticas, diseño o audiovisual, el proceso, según ANIAV, "fue asumido por las facultades de bellas artes" desde finales de los años setenta.

   Su inclusión en la universidad, ha reconocido la asociación, produjo una "importante transformación que requirió su continua adaptación a los estándares universitarios cada vez más exigentes, lo que requirió cumplir unos requisitos previos". "En la actualidad a las facultades de bellas artes se les exige los mismos requisitos de calidad que al resto de los estudios universitarios", ha indicado la asociación en un comunicado.

   Este, "que debería" ser el punto de partida de la nueva ley que prepara el gobierno, ha añadido ANIAV, "parece ser que se deja a un lado, quizás por la premura que las convocatorias electorales imponen para congraciarse con un posible nicho electoral".

   Sin embargo, consideran que "obviar los propios controles que la administración impone a las estructuras universitarias para garantizar su calidad y homologación no puede sino conducir a nuevos conflictos y contradicciones lejos de lo que debería ser un planteamiento claro y consensualizado del panorama educativo".

   Asimismo, consideran que "estas contradicciones" que introduce el Anteproyecto de Ley son "particularmente evidentes en el caso de los estudios de las escuelas de artes plásticas, diseño, conservación y restauración de España, públicas y privadas", que se equiparan con las instituciones universitarias "por decreto sin atender criterios de equivalencia, convirtiendo en graduados a estudiantes cuyo nivel de competencia se les equipara a la de los formados en el sistema universitario".

    En su opinión, esto "introduce no solo un agravio para el alumnado, sino también a la propia institución universitaria que ve deshacerse los estándares de calidad que tantas veces se les ha exigido, sustituidos por la arbitrariedades que introduce la ley y que probablemente puede dar lugar a recursos jurídicos".

   Para el colectivo, la nueva ley "solapa dos sistemas que estaban suficientemente coordinados generando dos sistemas paralelos que perteneciendo a dos niveles diferentes al equipararse solo producen un lío monumental en el actual sistema de enseñanza".

   Todo este "cúmulo de contradicciones", han argumentado, resulta "aún más evidente en el ámbito de la investigación, pilar de la institución universitaria, junto a docencia y gestión".

   Para la asociación, "la investigación artística, presente en los procesos de práctica y producción artística, si quiere ser reconocida y valorada como tal necesariamente, debe ser exigida y evaluada como lo es la propia investigación científica, sin perder de vista su propia idiosincrasia, por los estándares de calidad que impone la institución universitaria".

   A su juicio, el anteproyecto de Ley "baja, cuando no elimina, todo tipo de exigencia, tirando por tierra y descalificando todos los esfuerzos realizados hasta el momento". Consideran, asimismo, que el anteproyecto de Ley debería ser fruto "del consenso" y proponer soluciones a "la altura, abordando, aunque fuera mínimamente, su complejidad y ofreciendo una solución de futuro más allá de los intereses políticos particulares a corto plazo".

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