¿Por qué África arde cada verano?

Mapa de incendios en África el 10 de julio
NASA
Actualizado: lunes, 11 julio 2016 18:38

MADRID, 11 Jul. (EDIZIONES) -

Un vistazo a las fotografías por satélite que utiliza la NASA para tener controlados los incendios que se producen en la Tierra deja ver un patrón que se repite constantemente: cada año, con la llegada de la estación seca, África se llena de incendios.

Casi el 70 por ciento de los incendios que tienen lugar en el mundo ocurren en África, que acumula más del 50 por ciento de la tierra quemada en el mundo en las dos últimas décadas, de acuerdo a un estudio de la NASA de 2011.

En otras partes del mundo, como en el sudeste asiático o India, también tienen lugar estos episodios recurrentes de incendios, pero en ninguna otra parte del Planeta con la "dimensión" que ocurren en África. La razón no es otra que la milenaria tradición que impera en África de quemar la tierra antes de sembrarla.

"En muchos aspectos, África es un continente de fuego. Durante miles de años, los granjeros al sur del desierto del Sáhara han empleado el fuego como recurso para limpiar la tierra antes de sembrarla y regenerar el suelo", señala la NASA en uno de los comentarios a las muchas imágenes de satélite en que se refleja los incendios.

El zona del continente que se ve afectada va cambiando con las estaciones, comenzando en enero en las regiones más al norte y alcanzando el pico de incendios en junio o agusto en las regiones más al sur.

Los frecuentes incendios que tienen lugar en África contribuyen poco o casi nada a añadir carbón a la atmósfera, debido a que la vegetación quemada en la sabana vuelve a crecer rápidamente.

No obstante, esta práctica puede tener otros efectos indeseados. Así, otro reciente estudio de la NASA señala que el uso del fuego con fines agrícolas en el norte de África está afectando a las precipitaciones en la época de lluvia, de manera que en aquellas regiones regiones con incendios más frecuentes, en las que las nubes de humo se aprecian desde el satélite, llueve menos que en otras en las que no hay ese humo.