Expertos preparan una guía para que los municipios evalúen correctamente los riesgos del arbolado urbano

Arbol caido puertollano
EUROPA PRESS
Actualizado: domingo, 28 mayo 2017 15:18

MADRID, 28 May. (EUROPA PRESS) -

El Real Jardín Botánico, en Madrid, ha acogido este fin de semana un encuentro de trabajo entre técnicos y expertos en arboricultura y mantenimiento del arbolado urbano, con el objetivo de acabar con la "dispersión" que, según han explicado, existe a la hora de valorar el riesgo que supone el estado de los árboles en pueblos.

El riesgo de una mala valoración consiste, según han explicado, en que un mantenimiento inadecuado de los árboles puede acabar con el vuelco de un tronco o la caída de ramas que pueden resultar peligrosos el fallecimiento de personas debido al impacto recibido por estas.

La reunión, en la que han participado expertos de la Asociación Española de Arboricultura, de la Asociación Española de Parques y Jardines y la Fundació de la Jardineria i el Paisatge procedentes de todo el país, pretendía "unificar criterios y buscar unos estándares básicos en la evaluación de riesgo en arbolado urbano", según han explicado los organizadores del evento, celebrado en el Real Jardín Botánico de Madrid.

Con el trabajo realizado durante el fin de semana, los responsables elaborarán una serie de protocolos e informes que después se ofrecerán a la Federación Española de Municipios para que puedan utilizarlos en la gestión de riesgos derivados del arbolado, como la caída de ramas en mal estado, y favorecer sus beneficios medioambientales.

"La idea es ofrecer una toma de datos y un resultado uniforme para toda España con personal formado en arboricultura. España precisa profesionales conocedores de la biología arbórea y por eso es preciso ofrecer la necesidad urgente de formación reglada básica en arbolado para evitar errores que dañen irreversiblemente al arbolado urbano", ha explicado el conservador del Real Jardín Botánico-CSIC Mariano Sánchez.

El experto, que ha participado en las reuniones, ha explicado en declaraciones a Europa Press que, hasta ahora, cada vez que un ayuntamiento contrata los servicios de valoración de riesgo y mantenimiento, lo hace con unos criterios que en muchas ocasiones no están respaldados por unos conocimientos adecuados y que no tiene en cuenta, por ejemplo, la especie de árbol con la que se está tratando, su situación o la peligrosidad de determinados hongos que pueden provocar pudrimientos en las ramas.

Al margen de que, según ha explicado Sánchez, todavía no existe una disciplina académica específicamente dedicada a esta cuestión, algo que dificulta el trabajo de los profesionales que se dedican a ello porque "tienen que buscarse la vida" para aprender y ven dificultada su acreditación oficial; ha hecho hincapié en que uno de los daños derivados de la falta de conocimientos en esta materia consiste en que, en ocasiones, se toman medidas excesivas y se podan los árboles de forma innecesaria "para curarse en salud", limitando así sus efectos positivos para el medio ambiente y el entorno urbano.

"Hay que ser muy cuidadoso y ver de qué especie es porque si es, por ejemplo un pino en una pradera, ocurre que después de una tormenta con lluvia hay un gran riesgo de vuelco", ha ejemplificado el experto, que incide sin embargo en que hay "un montón de factores a tener en cuenta".

Por ello, el protocolo de análisis de riesgos incluye no solamente los factores a revisar y a tener en cuenta a la hora de realizar las inspecciones del arbolado público sino también en los requisitos de medios y personal que es necesario para llevar a cabo esta tarea y la formación que deben tener. "Un jardinero no puede hacer una valoración de riesgos", ha insistido el experto, que pide poner en valor la arboricultura.