MADRID 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Aumentar la potencia de las centrales nucleares en funcionamiento "no es algo novedoso" sino "simplemente" una consecuencia "lógica" del objetivo de optimizar los rendimientos, según informaron fuentes del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, después de que ayer el Pleno del Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) informara favorablemente, con condiciones, a la solicitud de la Central Nuclear de Almaraz de aumentar un 8 por ciento su potencia actual en la unidad I, hasta alcanzar los 2947 megavatios (MW) térmicos, un aumento que el titular de la planta quiere realizar con motivo de la recarga de combustible de este mes.
Así, el departamento que dirige Miguel Sebastián, explica que desde 1990 la potencia instalada en las centrales nucleares españolas se incrementó en 596 watios, es decir un 8,7 por ciento sobre la potencia eléctrica inicial del parque.
Además, las mismas fuentes señalan que la petición de Almaraz es "inferior a ese porcentaje" ya que prevé aumentar su potencia eléctrica en 120 megawatios (un 6,3 por ciento sobre los 1.913 actuales), lo que en términos de potencia térmica es un incremento "algo mayor", del 8 por ciento hasta los 2.947 megawatios térmicos.
Igualmente, indican que el titular de Almaraz solicitó al Ministerio la autorización para aumentar su potencia y para las modificaciones necesarias en la instalación el 21 de octubre de 2008, tras lo que este departamento requirió el correspondiente informe técnico al CSN, que ahora se hace público con carácter favorable, pero que el Ministerio de Industria "todavía tiene que recibir".
También, apunta que para que la planta atómica pueda funcionar con el nuevo aumento de potencia, la autorización de este incremento, deberá producirse antes del 9 de diciembre, fecha en la que se prevé alcanzar el modo de operación conocido como 'Modo 3-Espera en caliente'.
No obstante, recuerda que si no se autorizara esa subida de potencia antes de esa fecha, para que la central extremeña pudiera reanudar su funcionamiento tras la recarga, con la potencia actual, sería necesario autorizar antes de esa misma fecha una revisión de las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento y Estudio de Seguridad, para adaptar estos documentos a las modificaciones realizadas durante la carga.
El Consejo de Seguridad Nuclear informó ayer favorablemente sobre la petición de la central del Almaraz al Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, conforme a lo establecido en el Reglamento de Instalaciones Nucleares y Radiactivas (RINR).
La modificación de diseño, según el CSN, supone cambios de equipos y componentes, y ha hecho "necesario" revisar los análisis de accidentes junto a una serie de estudios de ingeniería para asegurar el correcto funcionamiento ante las nuevas condiciones operativas.
Las principales modificaciones incluyen cambios en la turbina de alta presión para acomodar el aumento del caudal de vapor, la sustitución de las bombas de condensado y de drenaje de los calentadores y del alternador por uno de mayor capacidad.
También contempla modificaciones en los equipos de refrigeración asociados y la implantación de torres de refrigeración adicionales para el sistema de refrigeración de turbina y generador eléctrico, hasta alcanzar las once por unidad.
Incluye, además, un nuevo tanque de aporte de agua para las nuevas torres de refrigeración y alimentaciones eléctricas a las nuevas torres de refrigeración y otras modificaciones de válvulas, entre las que destaca la eliminación del sello de agua de las válvulas de seguridad del presionador.
El informe del CSN incluye ocho condiciones, entre las que se encuentran la ejecución del Plan de Pruebas, tras la que Almaraz I retornará a la operación con 2729 MW de potencia térmica, hasta que sean apreciados favorablemente los resultados del Plan de Pruebas.