MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
La oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha expresado este martes su preocupación por la seguridad en los campamentos de desplazados en el este de la República Democrática del Congo (RDC) después de los saqueos, violaciones y palizas supuestamente cometidos por hombres armados en el campo de Mugunga III, en el exterior de Goma, capital de la provincia de Kivu Norte.
"No ha habido muertos ni heridos, pero al menos una persona ha sufrido una fuerte paliza y tanto las viviendas como la farmacia del campamento ha sido saqueadas", declaró el portavoz de ACNUR, Adrian Edwards. "Ha habido seis casos de violaciones sin confirmar", añadió.
La edición digital de Radio Okapi, emisora vinculada a la misión de la ONU en la RDC (MONUSCO), informó ayer lunes de que un grupo de hombres vestidos con uniforme militar y supuestamente pertenecientes al grupo armado rebelde M23 habían sido acusados de violar a seis mujeres y de saquear viviendas en Mugunga III, a unos siete kilómetros de Goma. El incidente se produjo el pasado sábado, en pleno proceso de retirada del M23 de Goma.
Varios testigos citados este martes por ACNUR indicaron que un pequeño grupo de hombres había irrumpido en el campamento y había empezado a supervisar la distribución de alimentos, probablemente para averiguar dónde residían los beneficiarios. Pocas horas más tarde, el campamento fue rodeado por un grupo mayor de hombres armados que pidieron a una mujer que les llevara hasta el jefe de la comunidad, antes de golpearla.
Posteriormente, los asaltantes empezaron a registrar las tiendas de campaña, a robar dinero, teléfonos móviles y paquetes de alimentos para dos semanas que había distribuido el Programa Mundial de Alimentos para alrededor de 1.800 familias. Las poblaciones residentes en las inmediaciones del campamento también han denunciado saqueos.
Aparte, según ACNUR, se está investigando la posible violación de seis mujeres y el uso como portadores del material saqueado de una decena de desplazados internos que fueron posteriormente liberados.
Los pocos policías desarmados que había en el campamento no pudieron intervenir y las tropas de la MONUSCO "no están en condiciones de mantener una presencia permanente en el lugar", según ACNUR. El personal de la agencia que visitó el campamento el lunes pudo comprobar la ansiedad y la molestia que aún reinaba entre sus habitantes.
"El incidente subraya la necesidad de que se priorice la seguridad en los campamentos de desplazados internos y se mejore el acceso humanitario para que esas poblaciones puedan estar mejor atendidas", advirtió Edwards.
Mugunga III alberga actualmente a alrededor de 300.000 personas. Aparte, otras 75.000 se encuentran en otros centros bajo la responsabilidad del grupo de Coordinación y Gestión de Campamento, controlado por varias agencias.
130.000 DESPLAZADOS
Según las cifras de la ONU, los recientes enfrentamientos entre el Ejército y el M23 han causado alrededor de 130.000 nuevos desplazados en la zona de Goma, que se unen a los 841.000 registrados antes de estos últimos acontecimientos.
En la provincia de Kivu Sur, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA) había registrado 878.000 desplazados internos a finales del pasado mes de octubre. Más del 96 por ciento de ellos viven en comunidades de acogida. La reciente toma de la ciudad de Sake por parte del M23 causó alrededor de 18.500 desplazados en Kivu Sur, sobre todo en los alrededores de Minova.
Estas cifras, según ACNUR, son provisionales, dado que no tienen en cuenta ni los recientes retornos ni la posibilidad de que algunas personas hayan huido de sus casas en múltiples ocasiones y, por tanto, hayan sido registradas varias veces como desplazadas.
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