Lula ordena la investigación del accidente aéreo más grave de la historia de Brasil

BRASILIA/MADRID, 19 Jul. (OTR/PRESS) -

El presidente de Brasil, Luiz Inácio 'Lula' da Silva ha ordenado a la Policía Federal que investigue la responsabilidad que podrían haber tenido los organismos públicos en la gestión de la pista de aterrizaje del aeropuerto Congonhas, en Sao Paulo, en la que se ha producido el accidente aéreo más grave de la historia del país y en el que podrían haber muerto al menos 200 personas. Al parecer, la pista fue abierta hace menos de un mes, tras haber sido reformada, pero la prensa brasileña se hizo eco de posibles deficiencias en su construcción, entre ellas, la carencia de un sistema de drenaje, precisamente, un factor, que el martes pudo producir que otro avión se deslizara en esa misma pista, aunque en esa ocasión no hubo víctimas.

En el interior del aparato que salió de Porto Alegre (en el sur del país) viajaban un total de 186 personas, de las cuales seis eran miembros de la tripulación. Entre el resto de los pasajeros había 18 trabajadores de la aerolínea brasileña TAM y un diputado federal. No habían pasado muchas horas tras el siniestro cuando las autoridades confirmaron los temores y aseguraron que no había esperanzas de encontrar a ningún superviviente entre las personas que viajaban a bordo del aparato.

Alrededor de las 17:15 horas del martes (22:15 hora española) el Airbus de la TAM no logró frenar tras posarse una primera vez en la pista de aterrizaje y, después de cruzar una de las avenidas más transitadas de la ciudad, la Washington Luiz, acabó estrellándose contra una gasolinera y un edificio de la propia compañía aérea, provocando un incendio de enormes dimensiones. Además de los 186 pasajeros, se confirmó la muerte de otras 14 personas que se encontraban en el edificio de la TAM o en sus alrededores en el momento del siniestro.

ESTADO DEL AVIÓN Y LA PISTA

El comandante de la Aeronáutica brasileña, Juniti Saito, telefoneó al presidente 'Lula' para informarle de que la caja negra del aparato, localizada durante la noche, fue enviada para ser analizada en Estados Unidos. El resultado de su investigación será estudiada por la comisión de profesionales del sector aeronáutico que investigará el accidente. Sin embargo, el presidente de TAM, Marco Bologna, dejó claro, en una rueda de prensa que el avión había realizado "más de 2.000 despegues" y otros tantos aterrizajes y que se trataba de una aeronave "homologada y compatible con la pista", aunque anunció la apertura de una investigación para concretar las causas.

La pista en la que derrapó el avión siniestrado había sufrido recientes reformas durante los meses de mayo y junio y fue reabierta el pasado 29 de junio. Precisamente, el pasado lunes un avión de la Pantanal también derrapó al aterrizar, igualmente en un día lluvioso, aunque sin que se produjesen víctimas. Según explicó un responsable cercano a la investigación al diario 'O Estadao', antes del aterrizaje, el comandante del vuelo fue informado por la torre de control de que la pista estaba mojada y resbaladiza.

Pero, después del primer toque en el suelo, cuando parecía que el aterrizaje iba a efectuarse sin problemas, la torre mandó un aviso para el siguiente avión que esperaba para aterrizar. En el momento del choque, explicó el oficial, la aeronave circulaba a 180 km/h, velocidad típica de quien intenta recuperar vuelo después de constatar que es imposible aterrizar. Además, la prensa se hizo eco de las sospechas de que la entrega de la pista, la principal del aeropuerto, sin el 'grooving', unas ranuras en la superficie del pavimento que facilitan el drenaje de la pista, haya influido en el accidente.

INVESTIGACIÓN

En este marco, el presidente 'Lula' ordenó al ministro de Justicia, Tarso Genro, que ponga en marcha una investigación para esclarecer la responsabilidad de los órganos públicos. "Por determinación del presidente, el ministro Tarso Genro solicitó al director general de la Policía Federal (Paulo Lacerda) que instaure una investigación policial para determinar si la pista del aeropuerto de Congonhas fue entregada por las autoridades públicas para el uso de los aviones dentro de las normas técnicas y legales de seguridad", explicó el ministro en un comunicado.

Mientras tanto, el Cuerpo de Bomberos, que descartó encontrar supervivientes en el aparato, continuó con los trabajos de rescate. Si finalmente fuera confirmado el fallecimiento de los 186 ocupantes del aparato, sumado a las 14 muertes en tierra anunciadas por el gobernador de Sao Paulo, José Serra, el total de víctimas mortales del mayor accidente aeronáutico de la historia de Brasil llegaría a los 200. Según explicó el coronel Manoel Araújo, los trabajos de retirada de los cuerpos se complicaron debido al peligro de derrumbamiento en partes del edificio que permanecieron en pie tras el siniestro.

Para facilitar estas tareas, el coordinador de Defensa Civil de la ciudad de Sao Paulo, Jair Paca de Lima, informó de que un total de 27 inmuebles cercanos tuvieron que ser desalojados de manera preventiva debido a la cantidad de humo que había y al riesgo de derrumbamiento en el edificio de la TAM. Ayer, el presidente decretó luto oficial de tres días en el país en memoria de las víctimas del accidente. Además, el alcalde de la ciudad, Gilberto Kassab, también decretó luto oficial en el municipio.