ROMA 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha renovado su llamamiento a promover la familia en la sociedad y a defenderla de las amenazas que la desafían en la actualidad, al tiempo que ha pedido "oraciones" y "no chismorreos" para el próximo Sínodo sobre la Familia que tendrá lugar en octubre de este año. "La Iglesia necesita oraciones para el Sínodo, no chismorreos", ha exclamado durante la audiencia general de este miércoles.
El Papa ha dirigido su llamamiento de oraciones para el Sínodo a cardenales, religiosos y fieles laicos, pero también a "los que ya no están acostumbrados a hacerlo" y a los que están "alejados de la Iglesia". "Es por el bien de todos", ha repetido el Pontífice.
Francisco ha destacado la conexión "sagrada e inviolable" entre Iglesia y familia. Así, ha explicado que el papel fundamental de la Iglesia en su relación con las familias es preocuparse por ellas, sobre todo por las que han sido "heridas", "mortificadas", aquellas que han caído "en el pecado" o se han "alejado de la Iglesia".
En este sentido, ha pedido que la Iglesia se esfuerce para que ninguna familia quede excluida de la Iglesia "ya sea dentro como fuera del redil".
Durante su discurso, ha pedido que se rece para que la Iglesia sea "capaz de cumplir esta misión" y enfocar al Sínodo de la Familia que se celebrará el próximo octubre. Por ello, ha pedido oraciones que estén llenas de "amor" y de la "compasión del buen pastor", que a su vez sean "sostenidas y animadas por la Gracia de Dios". Al tiempo, ha reclamado que se rece para que la Iglesia esté más unida y sea "testigo de la verdad del amor de Dios y de su misericordia para las familias del mundo".
JÓVENES PARADOS, "PRESA FÁCIL" PARA LAS MAFIAS
Por otro lado, el Papa ha denunciado que el paro convierte a los jóvenes en una "presa fácil" para las mafias, al tiempo que ha renovado su llamamiento para que prevalezca la lógica de la "solidaridad y la justicia" y no la del "provecho" en las cuestiones del trabajo. "Luchemos por esto, la justicia del trabajo", ha exclamado.
En este sentido, ha pedido que en el centro de las cuestiones del trabajo se ponga siempre "al hombre y su dignidad" porque, a su juicio, los asuntos laborales son una cuestión de "justicia". Así, ha dicho que el paro es "el drama de nuestro tiempo". "Es una injusticia no poder tener trabajo. Cuando no se gana el pan, se pierde la dignidad", ha denunciado.