ROMA, 6 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha pedido que los océanos "sean factores de conexión" y no "lugares de tragedias" y ha abogado por la "urgencia de adoptar una visión integral del desarrollo y de la ecología".
"El océano puede ser un factor de unión, un vector de conexión, una causa común", ha señalado el Pontífice en un mensaje firmado por el cardenal Secretario de Estado del Vaticano, Pietro Parolin, a los asistentes a la Conferencia 'Our Ocean', en Panamá que tuvo lugar del 2 al 3 de marzo. El tema de este año fue, precisamente, 'Nuestro océano, nuestra conexión'.
El Pontífice ha propuesto tres direcciones en las que comprometerse para vivir esta Conexión con todas las realidades implicadas: las administraciones, el sector privado, el mundo de la investigación, la política y la cultura, las organizaciones religiosas y juveniles, la comunidad internacional.
En la primera indicación, el Papa ha instado a revisar "con seriedad y urgencia las estrategias de crecimiento basadas en el desperdicio y el consumismo, en modelos injustos e insostenibles de producción, transporte, distribución y consumo, para reducir la deuda ecológica que asola los continentes y provoca también migraciones caóticas y la destrucción de los océanos".
En el segundo consejo, el Pontífice ha llamado a unirse "para proteger y restaurar los ecosistemas marinos, de las costas, y también de los ríos". "Esto --ha explicado el Papa-- reforzaría tanto un enfoque responsable como la educación y la cultura ecológicas necesarias para cualquier compromiso con la preservación y el uso conveniente de los océanos". El Papa ha dejado claro que también contribuiría al "éxito de un futuro mecanismo de protección de la biodiversidad en zonas situadas fuera de la jurisdicción de los distintos Estados (BBNJ)".
Asimismo, también ha destacado la importancia de facilitar "una administración eficaz y una coordinación institucional acorde al tamaño y a la complejidad del bien que se ha de proteger, el océano". "Unos 'sistemas de gobernanza' eficaces para el océano -ha dicho Francisco- requieren un trabajo inclusivo en la subsidiariedad, capaz de integrar las opiniones, conocimientos, aportaciones y esperanzas de todos".
En este sentido, ha pedido que haya "transparencia" en la toma de decisiones y seguimiento en su aplicación con vistas al bien común de toda la familia humana y ha considerado que, si se trabaja en estas direcciones, "siempre habrá esperanza".
En su mensaje, recuerda cómo todos los seres humanos dependen de los océanos, recibidos como un don del Creador, y cómo se espera que su uso sea "de forma justa y sostenible", para que se legue a las generaciones futuras "en buenas condiciones". Por ello, ha instado a adoptar una "visión integral del desarrollo" que incluya una visión integral de la ecología, tal como propone la encíclica 'Laudato si'.
Sin embargo, el Papa ha alertado de que todavía persisten fenómenos alarmantes de "contaminación de los océanos, acidificación, pesca ilegal y sobrepesca" y ha expresado su preocupación por "el desarrollo de la industria extractiva en los fondos marinos". A su vez, se ha referido a "las tragedias de los emigrantes que peligran en alta mar, el tráfico de seres humanos que se lleva a cabo en el mar, las condiciones de trabajo duras y a veces ilegales de los marinos, y las tensiones geopolíticas en zonas marinas consideradas importantes".
