ROMA 13 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha defendido la libertad de expresión de la Iglesia tras la protesta de Turquía después de que este domingo el Pontífice condenara el genocidio armenio provocando la repulsa del Gobierno de Ankara.
Durante la celebración matutina de la misa en la capilla de la Casa Santa Marta, Francisco ha dicho que el camino de la Iglesia es el de la "franqueza", el de "decir las cosas, con libertad". "No podemos callar ante lo que vemos u oímos", ha dicho en la homilía.
Por su parte, la Embajada de Turquía ante la Santa Sede ha declarado que "la historia ha sido instrumentalizada con fines políticos", en relación a la condena del Papa del genocidio armenio, durante la homilía de la misa celebrada en el Vaticano este domingo cuando se cumplieron 100 años de la masacre por parte del Imperio Otomano.
Además, ha calificado de "inaceptable" su sermón. Este domingo el Gobierno turco convocó al nuncio apostólico en Ankara, Antonio Lucibello, después de que Francisco calificara la masacre de los armenios hace 100 años como el "primer genocidio" del siglo XX.
Turquía, sucesora del Imperio otomano, no niega que las masacres de civiles armenios ocurrieron, pero tampoco admite que se tratase de un genocidio. De este modo, argumentan que las muertes no fueron el resultado de un plan de exterminio masivo, sistemático y premeditado dispuesto por el Estado otomano, sino que se debieron a las luchas interétnicas, las enfermedades y el hambre durante el confuso periodo de la Primera Guerra Mundial. Los armenios calculan que más de 1,5 millones de personas fueron asesinadas cuando el Imperio Otomano llegaba a su fin entre 1915 y 1917.