MADRID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Española de Promotores de Cursos en el Extranjero (ASEPROCE) ha recomendado a los estudiantes de intercambio en Estados Unidos (EEUU) realizar todos los trámites a través de empresas legales y acreditadas para evitar "serios" problemas y ha lanzado un mensaje de tranquilidad ante los últimos movimientos de la Administración Trump con respecto a la educación en el país.
"Aunque los estudiantes que cuenten con la documentación adecuada no tendrán problemas, es fundamental realizar todos los trámites a través de empresas legales y acreditadas. Gestionar la estancia a través de estas empresas pirata puede suponer serios problemas para el estudiante", ha advertido.
Aún así, ha querido tranquilizar a los jóvenes participantes de estos programas ante la incertidumbre generada por movimientos como la posible reducción o incluso desmantelamiento del Departamento de Educación de EEUU por parte de la Administración Trump.
En este sentido, ha recordado que la educación en el país no depende directamente del gobierno federal, sino que se gestiona principalmente a nivel estatal y local, especialmente a través de los distritos escolares. "Por ello, el impacto de estos cambios será muy reducido, incluso nulo, en los programas de intercambio", ha enfatizado.
ASEPROCE ha insistido en que una situación internacional temporal no debe condicionar una decisión "tan importante como la formación académica y profesional que marcará el futuro del estudiante". Así, recuerda que programas de intercambio como este tienen un fuerte componente histórico y social: fueron iniciados por familias y comunidades estadounidenses durante la Segunda Guerra Mundial y han perdurado hasta hoy "gracias a su generosidad y compromiso".
Además, ha subrayado que la obtención de los visados J1 y F1 para Estados Unidos (EEUU) --los usados por estudiantes de intercambio-- se está realizando "sin ningún tipo de dificultad en este momento, según .
En concreto, el visado J1 es una modalidad de intercambio cultural que generalmente cubre un año académico completo, aunque también existe la opción de cursar solo un semestre. Con él, el estudiante vive con una familia de acogida voluntaria y realiza su actividad académica en un instituto público estadounidense. Está dirigido a jóvenes de entre 14 y 18 años con un buen nivel de inglés y expediente académico sólido.
Por su parte, el visado F1 responde a un programa académico privado que tiene validez para varios años y permite continuar en el mismo centro educativo durante más tiempo. En este caso, el estudiante puede elegir entre una familia de acogida remunerada o un internado. La actividad académica se realiza en colegios privados (o públicos con condiciones especiales) y los requisitos son más flexibles en cuanto al nivel de inglés y el expediente académico del estudiante.