El propietario de una guardería de Barcelona cree que el ayuntamiento le "extorsiona" para cerrar el centro

Actualizado: viernes, 18 julio 2008 11:27


BARCELONA, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Llar d'Infants La Granota, situada en la calle València de Barcelona, deberá clausurar sus puertas a más de 180 niños el próximo 31 de julio porque el ayuntamiento de la ciudad ordenó su cierre por no disponer de la licencia de actividad del consistorio, aunque el propietario Juan Luis Liste reconoció que se trata de "una extorsión sin sentido".

Por eso, explicó a Europa Press Televisión que si no paran este proceso se verá obligado a tomar las medidas legales pertinentes para defender que el centro educativo "existe y debe existir en beneficio de los niños", y a pesar de la indignación que siente este hombre, confía en que la administración municipal "recapacite".

El pasado 2 de julio de 2007, la Generalitat resolvió revocar la autorización de apertura y funcionamiento de la guardería tras llevar a cabo un expediente de inspección a La Granota. Por su parte, el consistorio pidió a su propietario que regularizase la situación, y aunque en su orden de cierre, fechada el pasado noviembre, explican que no se ha actuado en este sentido, Liste reconoce que "mienten".

Según anunció recientemente el departamento de Prevención, Seguridad y Movilidad del ayuntamiento, "hay problemas que obligan al cierre", pero Juan Luís no termina de comprender por qué quieren cerrar su guardería después de 28 años si posee documentos "sellados por el ayuntamiento" que le acreditan para ejercer la actividad.

Además, lamentó la problemática que padecen los centros educativos catalanes por culpa de las constantes reformas legales que cambian las condiciones y necesidades de las guarderías. "He seguido todas las normas", exclamó Juan Luís.

"UNA GUARDERÍA ESTUPENDA"

Los padres que esta tarde acudieron a la guardería reconocieron estar "encantados con la educación y el cariño" que reciben sus hijos, tanto por parte de las profesoras como del trato con las secretarias y el director del centro.

"Es una guardería estupenda y se la recomiendo a todo el mundo", reconoció Marta, porque además este centro del Eixample barcelonés cuenta con unas instalaciones "inmejorables". Con casi 1.800 metros cuadrados, sus más de 180 alumnos disponen de quince aulas y tres terrazas para jugar y aprender.

"Están tomando medidas exageradas", comentó Judit Mateu después de recoger a su hija en el aula de La Granota. Además, resaltó que si el ayuntamiento consigue cerrar la guardería sería "una pena porque es toda una institución en el barrio".

Por otra parte, Carlos, padre de un niño de dos años, explicó que muchos padres se están "organizando para tener más fuerza" y tratar de evitar que el ayuntamiento precinte el centro educativo. Aun así, reconoció que sienten "preocupación al no saber si los niños podrán matricularse en septiembre o no".