MADRID, 12 Sep. (EUROPA PRESS) -
Varios centenares de personas, en torno a las 2.000, se manifestaron esta tarde entre la plaza Elíptica y Legazpi para homenajear a Carlos Palomino y apoyar a su familia en el juicio sobre su asesinato, que empezará la próxima semana, una marcha que transcurrió sin incidentes y en medio de amenazas a la prensa proferidas por varios miembros de la organización.
La manifestación, que comenzó a las 18.00 horas, estuvo encabezada por una gran bandera con la imagen de Carlos Palomino, el adolescente asesinado en noviembre de 2007 presuntamente por un militar que acudía a una manifestación de Democracia Nacional. La primera pancarta, en la que se leía 'Sin justicia no habrá paz. Carlos vive. Josué asesino' y 'Por ti, por mí, por Carlos' fue portada por vecinos de Arganzuelo y por la madre del joven, Mavi Muñoz, que afirmó que el juicio de Carlos "cerrará un círculo", pero "Carlos estará muy presente y será un miembro más de los caídos ante el fascismo".
"Aquí se acabó el ciclo Carlos. Hemos pedido su justicia, esperamos que sea justa realmente. Ya será recordado cuando sea el aniversario de asesinato. Ahora hay que empezar a trabajar en otros niveles y en ello estaremos. Los chicos trabajarán en sus programas de trabajo y yo desde mi asociación. Y esto será en base a la misma lucha: las víctimas contra la violencia del fascismo, xenofobia y racismo", señaló Muñoz.
"NI OLVIDO NI PERDÓN"
Respecto al proceso judicial, Mavi afirmó que no sabe cómo reaccionará al ver la cara al presunto asesino de su hijo. "Yo, lamentablemente, no soy una persona de doble rasero y no tengo por qué decir lo que no siento. Para mí Carlos, olvidarlos jamás, será imposible. Y perdonar a su asesino, no lo perdono. Que lo perdono el que esté arriba si lo tiene que perdonar. Yo no", apuntó.
Además, la madre de Palomino reconoció que ya ha visto las imágenes del Metro de Legazpi, momento en el que su hijo muere tras recibir una puñalada en el corazón, y señaló al respecto que todos los que acompañaron a Carlos en ese momento le dijeron la verdad desde el primer momento, "y no hay un ápice de variación de las imágenes contadas a las vistas".
Por otro lado, la madre de Carlos Palomino indicó que las concentraciones convocadas en la Audiencia Provincial durante los días en los que se celebre el juicio "no se realizarán en la misma puerta y no van a interferir para nada; no se van a oír los gritos".
"Solamente se reconoce que siguen apoyando y sólo quieren justicia para Carlos y que se reconozca que ya está bien de tanta tolerancia a estos individuos --en referencia a los miembros de los grupos ultra derechistas y de sus manifestaciones--, que han tenido demasiados años manipulando a la gente, tergiversando y asesinando, que es lo peor", añadió.
DIFICULTADES EN LA COBERTURA INFORMATIVA
Durante la marcha, que recorrió las principales calles del distrito de Usera, los participantes corearon lemas como 'No es delito ser un antifascista', 'Carlos hermano nosotros no olvidamos', 'Ninguna agresión sin respuesta' y 'Josué asesino', entre otros. Además, en la misma participaron colectivos antifascistas de toda España.
Asimismo, lanzaron proclamas como 'Televisión-manipulación' y algunos de los responsables de la organización de la marcha impidieron hacer fotografías y grabar a los periodistas en su perímetro. De hecho, varias pancartas laterales y miembros del cordón de seguridad, con un distintivo gris en el brazo y la mayoría protegidos con bragas, gorras y gafas, intentaban evitar los disparos de las cámaras y las filmaciones, e impedían que los coches circularan por las calles ocupadas por los manifestantes.
En un momento dado, uno de los miembros de este 'protocolo de seguridad', con larga vara negra, amenazó a un fotógrafo de un medio digital. Tras este incidente, los profesionales pusieron sus cámaras en el suelo en un 'plantón audiovisual', como protesta por las dificultades pasadas en el desarrollo de su trabajo.
La marcha terminó a las 20 horas en la paseo de las Delicias, concretamente en la boca del Metro de esa calle, donde está fijada una placa en recuerdo al asesinato de Palomino. El portavoz de la manifestación leyó un comunicado, que acabó al grito 'Carlos vive, la lucha sigue' y 'Madrid será la tumba del fascismo'. Minutos después, los manifestantes se fueron dispersando ante la vigilante mirada de las Fuerzas de Seguridad. Muchos de ellos acudirán, ya por la noche, a un concierto homenaje a Palomino en una casa ocupa cercana.
La manifestación estuvo fuertemente vigilada por un helicóptero de la Policía Nacional y por cuatro furgonas del Cuerpo en la cabecera y cinco en el cierre. Los agentes se desplegaron por la cabecera, por las calles laterales y en el final de la manifestación, así como en las bocas del Metro cercanas, para controlar que los manifestantes no llevaran objetos contundentes ni intentaran provocar destrozos.
Igualmente, en la cola de la manifestación circularon dos ambulancias y varias máquinas del Servicio de Limpieza Urgente (SELUR) del Ayuntamiento de Madrid.
Tras la iniciativa de hoy, los actos de apoyo a la familia de Palomino de cara al juicio que comenzará la próxima semana continúan. Además de las concentraciones cercanas a la Audiencia durante estos días, mañana, a las 12 horas, en el Ateneo de Vallecas acogerá una rueda de prensa donde se presentará la Asociación en apoyo a las Víctimas de la Violencia Fascista, Xenófoba y Racista , que ha fundado y dirige Mavi Muñoz.
