(Ampliación) El sacerdote fallecido en Murcia estaba jubilado y su última parroquia había sido la de El Puntal

MURCIA 11 Abr. (EUROPA PRESS) -

El sacerdote cuyo cuerpo sin vida fue encontrado hoy en Murcia, con un fuerte golpe en la cabeza y atado, estaba jubilado y su última parroquia había sido la de La Santa Cruz, en la pedanía murciana de El Puntal, donde ofició su última Misa en noviembre de 2006, fecha de inicio de su retiro, según confirmó a Europa Press un portavoz del Obispado de Cartagena.

El fallecido, Salvador Fernández Ciller, natural de Cehegín y de 76 años, fue hallado por una vecina en su domilicio, ubicado en la calle Ruiz Hidalgo del barrio del Carmen, en Murcia.

La mujer, quien contaba con una llave de la vivienda, llevaba tres días sin ver al sacerdote, por lo que decidió acudir a la casa para ver si se encontraba bien y, al no recibir respuesta, entró en el domicilio y encontró el cadáver del anciano, sobre las 11.30 horas de hoy.

El caso se encuentra bajo secreto de sumario y está en manos de la Policía Nacional, de ahí que desde el Obispado de Cartagena declinaran barajar alguna hipótesis sobre lo ocurrido, salvo confirmar que se trata de una muerte violenta.

El mismo portavoz comentó a Europa Press que el fallecido era una persona "espléndida y muy querida" y, a modo de anéctoda, recordó que "daba bocadillos a los pobres que se acercaban". Al lugar del suceso se trasladó el vicario general, Miguel Ángel Cárceles, así como un abogado de la diócesis.