BARCELONA, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona iniciará este verano actuaciones de mantenimiento, rehabilitación y mejora del patrimonio arquitectónico del Park Güell de Barcelona y su entorno valoradas en un total de 5,7 millones de euros.
Según han explicado este jueves en rueda de prensa el alcalde accidental, Jaume Collboni, y el concejal de Presidencia, Agua y Energía, Eloi Badia, se trata de un conjunto de ocho proyectos que Barcelona Servicios Municipales (BSM) llevará a cabo.
Collboni ha explicado que la inversión destinada a estas obras, que busca garantizar el buen acceso y la conservación de las zonas de acceso del parque, procede del dinero obtenido por las entradas, que genera un beneficio anual de 15 millones de euros.
LAS OBRAS
En el interior de la zona patrimonial se completará la reparación del techo de la Sala Hipòstila, se remodelará la Font de la Sarva y se restaurará el viaducto de Baix y el exterior del banco perimetral de la plaza de la Natura.
En el entorno de la zona monumental se rehabilitarán las escaleras de Pompeu Fabra, se acondicionará la bajada de la Glòria y se mejorará la accesibilidad en la entrada del parque para recuperar el ámbito como mirador i espacio de recreo.
En el distrito Horta-Guinardó, se mejorará la red de saneamiento, se arreglarán los entornos del campo de fútbol del CD Carmel y se reparará el sistema de drenaje de escorrentías superficiales.
Además, los caminos de la zona de juegos infantiles se acondicionarán con pavimento más resistente y se repararán las zonas de arenisca degradada.
LAS ENTRADAS COMO FUENTE DE INVERSIÓN
"Una parte substancial del dinero se destina a mejorar el patrimonio arquitectónico y otra parte a compensar otros servicios que hace BCM en la ciudad, como el Bicing, que es deficitario", ha explicado el alcalde accidental.
Con ello, Collboni ha destacado la rentabilidad de hacer pagar la entrada al parque, ya que los beneficios "revierten en la ciudad en forma de mejora de los entornos y la convivencia", algo que permite racionar y gobernar un monumento de todos los barceloneses, ha añadido.
En esta misma línea, el concejal Eloi Badia ha aprovechado para poner en valor esta medida porque, según ha explicado, forma parte de las políticas necesarias de regulación de los espacios saturados de la ciudad; de hecho, la afluencia del Park Güell ha pasado de 9 millones en 2012 a 3 en 2016.