Guías turísticos de Baleares piden que no se restrinja la llegada de cruceros y califican de injusta la doble tasa

PALMA 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Proguías Turísticos, asociada a Pimem, ha pedido este miércoles que no se restrinja la llegada de cruceros a Palma y ha calificado de injustas las medidas que tiene previsto impulsar el Ayuntamiento de la capital balear.

La entidad han asegurado que los cruceros han sido los únicos que en los últimos cuatro años han sufrido limitaciones que han llevado a una reducción de escalas del 17% y actualmente representan sólo el 11% de los visitantes.

Los guías han añadido que a esta reducción de escalas se suma la "injusta propuesta" de Cort de cobrar a los cruceristas una doble tasa, una por entrar en el puerto y la otra por entrar en la ciudad, extremo que para el portavoz, Alex Fraile, "es un hecho discriminatorio que carece de argumentos".

Para los guías "otro gran error" que puede cometer el Ayuntamiento de Palma es priorizar los cruceros pequeños ya que estos "son mucho más contaminantes". Además, han pedido gestionar mejor los flujos haciendo posible la entrada de los visitantes por diferentes puntos de Palma y así evitar los colapsos puntuales.

La asociación de Proguías ha asegurado que el turismo de cruceros es un turismo de alto valor añadido, de turistas que suelen ser familias que muestran interés por la cultura y tradiciones del destino, realizan el gasto medio diario más elevado de todos los turistas que nos visitan y sin consumir territorio.

MASIFICACIÓN POR LA OFERTA VACACIONAL ILEGAL

En relación a la masificación, para la asociación de Pimem este fenómeno se produce principalmente por la oferta vacacional ilegal al tiempo que ha criticado que en los últimos años se limitaran los cruceros mientras se permitía crear 115.000 plazas hoteleras.

Sobre la idea de crear grupos pequeños en las visitas, los guías lo ven "absurdo" ya que supondría dividir más a los grupos y multiplicar los guías y los autocares.

Los guías turísticos han advertido del aumento de carteristas en el Castillo de Bellver y han señalado, por contra, que en Valldemossa se han reducido gracias a policías locales infiltrados. Han pedido igualmente que se combata la presencia de manteros, así como de guías ilegales.