MADRID, 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ministra de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, ha insistido durante su participación en un consejo informal de ministros de Transporte de la Unión Europea, celebrado en Praga, en la necesidad de acelerar las conexiones transfronterizas en tren entre los distintos países europeos.
Sánchez ha requerido más voluntad política para no dilatar más en el tiempo los proyectos y cumplir así con los compromisos climáticos, tras demostrar, según la ministra, que los avances realizados hasta el momento han sido "claramente insuficientes".
"Si queremos una auténtica red ferroviaria europea es fundamental acelerar las inversiones para garantizar la consecución efectiva de los corredores ferroviarios europeos y establecer prioridades más allá de los intereses nacionales", ha defendido.
Sánchez también ha aprovechado para pedir que se garantice la competencia efectiva en los itinerarios nacionales e internacionales, con una "verdadera liberalización de los servicios ferroviarios en todos los Estados miembros".
La Administración española ya ha trasladado en varias ocasiones sus críticas al proceso de liberalización francés, que pone trabas a la entrada en el país de compañías nacionales de otros países, caso de la española Renfe. Por el contrario, su empresa pública de trenes, SNCF, sí ha entrado en España por medio de Ouigo.
De hecho, la ministra le ha trasladado al ministro delegado encargado de los Transportes de Francia, Clément Bauneal, las dificultades que está experimentando Renfe para poder operar en la red ferroviaria francesa.
"Con ello, conseguiremos un trasvase de viajeros del vehículo privado al ferrocarril como ya estamos logrando en España, mediante una competencia entre distintas compañías y servicios, que convierte al ferrocarril de alta velocidad en una alternativa real por costes, fiabilidad y calidad de servicio", explicó la ministra al respecto.
Sánchez también le ha señalado a Baune la importancia de firmar el nuevo convenio para la gestión de la línea Figueres-Perpignan, que actualmente está operada por una sociedad participada por Adif y SNCF-Réseau, y cuya vigencia expira el próximo 20 de diciembre de 2022.
