MADRID, 4 Mar. (OTR/PRESS) -
Callejeros cumple 200 programas. Y lo hace con sus señas de identidad intactas: cercanía y realismo sin aditivos. Han pasado más de 50 meses, 1.500 días, millones de kilómetros, cientos de personajes, cubos llenos de lágrimas, lotes de carcajadas... El programa que cada viernes, en Cuatro, pone voz y rostro a la calle prepara un mes de celebraciones con varios programas especiales y una edición extraordinaria en la que aparecerán algunos de los hombres y mujeres más conocidos de toda su historia televisiva.
Por ejemplo, Ramón de Pitis, aquel preso que estaba de permiso y se encontró a Alejandra Andrade en la parada del Metro que dio nombre a su apodo. "Yo soy un vanidoso porque visto de Emilio Tucci" fue una de sus frases míticas. El efecto Ramón fue creciendo hasta hoy, que tiene más de 17.000 entradas en internet.
Él es uno de tantos protagonistas que han pasado por las cámaras de los reporteros de Cuatro y que sus seguidores podrán recordar en los próximos días, ya que 'Callejeros' emitirá cada viernes, durante un mes, lo mejor de lo mejor del programa.
Y para empezar, este viernes, a partir de las 22.30 horas, Cuatro emite 'Valle de Jinámar', en el corazón de la isla de Gran Canaria, a 15 minutos del centro de Las Palmas. Allí, hace 35 años se empezaron a construir bloques de viviendas de protección oficial, que hoy se conocen como los amarillos. Julio, en su vivienda que se cae a pedazos, asegura "cualquier día va a pasar una desgracia. Por aquí hay muchos niños pequeños". Un hombre extremadamente delgado se acerca a la cámara de Callejeros y cuenta: "Yo quiero decir a los jóvenes que no sean gilipollas, que no prueben las drogas, que eso es una mierda". Es uno más de los muchos que empezaron a consumir heroína hace dos décadas. "Es que no sabíamos lo que era, pero así nos ha ido". En la actualidad, otro de los graves problemas que sufre este barrio es su altísima tasa de desempleo.
El 11 de noviembre de 2005 se parió literalmente Callejeros: el programa se estrenaba con 'Simplemente María', un reportaje sobre el nacimiento de una preciosa niña que dio título al nombre del capítulo, y que como 'Callejeros', hoy ya tiene cuatro años y medio. 'Callejeros' nació al mismo tiempo que la cadena, y en poco tiempo, se convirtió no sólo en uno de los programas más vistos, sino en uno de los referentes de Cuatro y en una manera de hacer televisión que es ya objeto de estudio de numerosas universidades y escuelas de periodismo.
Los 'Callejeros' dan voz a personas e historias invisibles en otros medios, y lo hacen con respeto, con dignidad y con rigor. Con la realidad como única referencia. A lo largo de cinco temporadas, los reporteros del programa mostraron la degradación del Cabanyal, grabaron un rescate en patera en pleno Estrecho de Gibraltar, desvelaron la situación de la Cañada Real o del barrio coruñés de Penamoa, y convirtieron algunos programas -como el especial de tráfico previo a Semana Santa- en una cita clásica con los espectadores.
En estos cuatro años y medio, los Callejeros también han situado la cámara frente a temas más amables, pero igualmente sorprendentes, como el lujo vivido desde el barrio madrileño de La Moraleja o en casas de más de un millón de euros.
