Iturbe pide que la Mesa de la Montaña rechace las urbanizaciones pirenaicas y ADELPA reclama "alternativas de verdad"

Actualizado: miércoles, 28 octubre 2009 0:47

ZARAGOZA, 27 Oct. (EUROPA PRESS) -

El miembro de la Plataforma en Defensa de las Montañas Francisco Iturbe rechazó hoy los proyectos de construcción de urbanizaciones turísticas en los valles del Pirineo altoaragonés como mecanismo para financiar los proyectos económicos del sector de la nieve, mientras que el vicepresidente de la Asociación de Entidades Locales del Pirineo Aragonés (ADELPA), José Luis Sánchez, exigió a los ecologistas "alternativas de verdad" para frenar la despoblación en el macizo.

La Mesa de la Montaña se reunió hoy, martes 27 de octubre, para continuar los trabajos de preparación de los materiales escritos que, durante el primer trimestre de 2010, los Grupos Parlamentarios de las Cortes de Aragón recibirán como Comunicación del Gobierno autónomo para elaborar la futura Ley autonómica de protección y desarrollo de las zonas de montaña. La Mesa alcanzó algunos acuerdos, aunque se mantiene el escollo de las urbanizaciones pirenaicas.

En declaraciones a Europa Press, el vicepresidente de ADELPA y actual concejal socialista de Sallent de Gállego afirmó que "los sistemas que ha utilizado Aramón son sistemas muy asumibles por el territorio", aludiendo a la combinación de las estaciones de esquí con las urbanizaciones y otros servicios para los turistas, tanto en invierno como en verano. Precisamente "ahí están las diferencias, claro", señaló José Luis Sánchez.

"Para nosotros --los habitantes del Pirineo-- el urbanismo es una forma de obtener financiación, mientras que el mundo del ecologismo no dice de dónde saca los medios económicos" para mantener o incrementar el número de habitantes en el Pirineo. Según Sánchez, "en el fondo no les gusta el mundo de la nieve".

El ex-alcalde sallentino indicó que, en el Pirineo aragonés, sólo crecen las poblaciones en las que hay tanto turismo de invierno como de verano, y explicó que en Sallent de Gállego viven unas 1.400 personas y cada año trabajan unas 2.100 personas, con el alta en la Seguridad Social. "Se beneficia gente de Sabiñánigo, Biescas, Pamplona, Zaragoza", dijo Sánchez, quien comentó que hoy la Mesa de la Montaña acordó pedir al Gobierno autónomo que realice estudios socioeconómicos que informen los proyectos del sector de la nieve.

José Luis Sánchez prosiguió afirmando que "es indudable" que el turismo de invierno y de verano "nos han traído riqueza, empleo, juventud" y recomendó comparar la evolución socioeconómica de las poblaciones de valles turísticos y de valles ganaderos. Al respecto, comentó que donde hay turismo todo el año el número de habitantes es cuatro veces superior que donde no hay turismo y las altas en la Seguridad Social se multiplican por 10. La natalidad se dobla en unos valles respecto a otros. ADELPA solicitó la participación de demógrafos profesionales para apoyar los trabajos de la Mesa.

José Luis Sánchez alertó de los progresivos problemas de la ganadería de montaña, donde se está quebrando el relevo generacional. Aunque todavía se mantiene la cabaña ganadera, los hijos de los ganaderos del Pirineo altoaragonés actualmente en ejercicio "van a ser universitarios, no van a ser ganaderos", dijo Sánchez, quien pidió la adopción de "medidas drásticas".

Al contrario, los ecologistas de la Plataforma en Defensa de las Montañas rechazan de plano la propuesta de los empresarios, en especial el Grupo Aramón, de levantar urbanizaciones junto a estaciones de esquí, según dijo a Europa Press el conservacionista Paco Iturbe, quien criticó, entre otros, el proyecto de construcción de miles de viviendas de uso turístico en el valle de Castanesa, donde se creará una estación de esquí que será la prolongación de la histórica estación de Cerler, en el Pirineo oscense. En este valle viven unas 300 personas, según Iturbe.

Sí que hay consenso, señaló Iturbe, en la propuesta de priorizar la construcción de hoteles frente a segundas residencias, sean urbanizaciones o viviendas unifamiliares, así como la construcción de los nuevos espacios residenciales en las cotas más bajas y nunca en las más altas, siempre manteniendo la arquitectura tradicional. Francisco Iturbe expresó que, asimismo, hay consenso sobre la necesidad de construir aparcamientos en las cotas más bajas y facilitar el acceso de los usuarios de las instalaciones de nieve mediante transporte colectivo, ya sean autobuses o por cable. Al respecto, José Luis Sánchez precisó que los nuevos proyectos constructivos se levantarán en cotas menos altas dependiendo de "cada caso".

Iturbe indicó que también hay consenso en la propuesta de potenciar la actividad económica de los municipios del entorno de las estaciones, de tal manera que los residentes habituales tendrían preferencia para ser contratados como empleados de las mismas y las empresas de la zona prestarían servicios como proveedores o de cualquier otra forma. Iturbe recomendó que, antes de aprobarse los nuevos proyectos, se elaboren informes sobre el impacto socioeconómico.

El dirigente ecologista abogó por mantener la ganadería de montaña para conservar los pastos, lo que contó con el apoyo de José Luis Sánchez. Iturbe añadió que es preciso mantener esta actividad por motivos culturales y socioeconómicos, tras lo que propuso que los nuevos proyectos del sector de la nieve tengan en cuenta la actividad ganadera que haya en los valles en los que se vaya a instalar. La Mesa de la Montaña se volverá a reunir el próximo 10 de noviembre.