BARCELONA, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -
El PSC ha pedido este miércoles en una intervención en el Parlament que el Govern suprima las misas de sus actos institucionales para contribuir a que Catalunya sea una "democracia avanzada" en la que se respete plenamente la libertad ideológica y religiosa.
En su turno de réplica, la vicepresidenta de la Generalitat, Joana Ortega, ha acusado a los socialistas de "crear conflictividad allá no donde no la hay" con propuestas como ésta que, a su juicio, no interesan a la gente.
El diputado socialista Ferran Pedret ha asegurado que con esta propuesta su grupo no plantea ninguna "confrontación", sino que todos los catalanes se sientan representados por sus instituciones independientemente de sus creencias religiosas.
Ha recordado que el expresidente Pasqual Maragall dejó de ir a algunas misas en las que tradicionalmente acudía el Govern, mientras que el expresidente José Montilla rectificó y decidió acudir: "Le doy más mérito a la primera decisión que a la segunda".
"Queremos una democracia avanzada con pleno respeto a la laicidad y a la aconfesionalidad", ha sentenciado el diputado socialista, cuyo partido presentó en abril una proposición de ley --pendiente de debatir-- que pide garantizar que todos los actos institucionales que convoque el Govern sean aconfesionales.
Ortega ha asegurado que el Govern manifiesta un escrupuloso respeto por la separación entre religión y poderes públicos, pero ha defendido que "no se pueden confundir laicismo con renunciar a las tradiciones culturales".
OBSESIONES
Para el Govern, el PSC está "obsesionado en excluir el hecho religioso de la sociedad", y considera su propuesta como una huida hacia delante ante la incapacidad de presentar propuestas económicas y sociales.
Así, el Ejecutivo catalán ha defendido la celebración de misas en sus actos institucionales, como el día de Sant Jordi, porque el laicismo se puede combinar con el "máximo respeto a las tradiciones y a la libertad de las personas".
