Un emotivo acto da la bienvenida a los últimos 65 militares de la misión del Cuartel General de Bétera en Afganistán

Uno de los militares se abraza a su familia tras bajar del avión
EUROPA PRESS
Actualizado: viernes, 25 enero 2013 17:38

Familiares de todas las edades reciben a sus seres queridos con pancartas de bienvenida, besos y abrazos tras seis meses de ausencia


VALENCIA, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -

Los últimos 65 militares del Cuartel General de Bétera (Valencia) desplegados en Kabul (Afganistán) en el marco del Mando Conjunto de ISAF han aterrizado este viernes en el aeropuerto de Manises, donde han sido recibidos por sus familias, en un emotivo reencuentro en el que no han faltado pancartas de bienvenida, abrazos, besos e, incluso, alguna lágrima.

Con este repliegue, el Cuartel General de Bétera da por concluida su misión en Afganistán, desarrollada a lo largo de 2012 con dos rotaciones semestrales en las que han participado un total de 200 miembros del cuartel valenciano, de los que 160 son españoles y los 40 restantes de países aliados, de entre ellos cinco mujeres.

Esta misión corresponde a la primera rotación del Cuartel General de Despliegue Rápido de la Alianza (HQ NRDC-SP) y se enmarca dentro del turno establecido entre los siete Cuarteles Generales de Despliegue Rápido de la OTAN, que en 2013 pasa a manos de Milán.

El vuelo ha aterrizado en tierras valencianas a las 13.50 horas procedente de Rammstein (Alemania), donde llegó el jueves procedente de Kabul, una escala inesperada que ha alargado el esperado reencuentro entre los soldados y sus familias, que esperaban impacientes ver a los suyos descender del avión.

María José, mujer de uno de los militares, comentaba a los medios que después de seis meses tenía "muchísimas ganas" de ver a su esposo y que lo peor de este tiempo separados ha sido la Navidad. "Estamos bastante acostumbrados porque es la cuarta vez, dentro de lo que cabe lo llevamos bastante bien, pero tenemos ganas de verle y hacer ya vida normal", ha indicado. Según ha confesado, ha pasado miedo durante este tiempo, pero ha apuntado que "una no puede estar siempre pensando que le va a pasar algo".

Con unos años más, Victoria García, esperaba a pie de pista la llegada de su nieta, de 28 años, que por primera vez participaba en una misión. "Tan lejos", lamentaba la mujer, que no obstante ha apostillado que "si ella es feliz así, nosotros también".

También Estefanía Rubio, novia de un soldado de apenas 22 años, manifestaba con una amplia sonrisa su alegría por el reencuentro y aunque admitía que ha hablado con su pareja a menudo por teléfono, ha reconocido que en ocasiones ha pasado miedo.

Tras diez horas de vuelo, el reencuentro con sus seres queridos ha dejado emotivas estampas, con algunos familiares a la carrera para abrazar a sus maridos o padres, ante los flashes de las cámaras.

Uno de los soldados, Juan Descalzos, aseguraba que lo mejor de la misión ha sido "volver", en tanto que Javier Azcárraga indicaba que durante esta "larga" misión ha echado de menos su casa. Ahora, coincidían varios de los militares, toca disfrutar de las vacaciones en compañía de la familia.

UNA MISIÓN "DURA, DIFÍCIL Y PELIGROSA"

El general de División, Javier Cabeza, ha calificado esta llegada de "muy deseada y muy emotiva" y ha asegurado que, aunque se ha retrasado más de lo previsto, "incluso a un soldado viejo" como él "se le mueve algo dentro" cuando regresa y ve por primera vez a los suyos.

La misión, ha señalado, ha sido "dura, difícil y peligrosa", pero ha celebrado que, "afortunadamente", han vuelto todos los efectivos que partieron. Asimismo, ha destacado la "valía" de todos los militares desplegados, que "se han portado como soldados", y su contribución a que la situación en el país mejore.

El objetivo de la misión ha sido contribuir en el planeamiento y la conducción de las operaciones de las tropas que están desplegadas en Afganistán, cuyo fin es ayudar "a que los afganos sean conscientes de que ellos tienen que tomar la responsabilidad de la seguridad de su país".

EL FUTURO DE AFGANISTÁN

"Ellos, afortunadamente, están cada vez mejor preparados, asumiendo sus responsabilidades en cada vez más parte del país y calculamos que si todo sigue conforme a lo previsto a finales de 2014, que es el plazo acordado en las cumbres de Lisboa y de Chicago, serán capaces de asumir la responsabilidad de la totalidad del país", ha apuntado en declaraciones a los medios.

Por ello, ha manifestado que ha sido para él, que ha permanecido un año en Kabul, "representar los intereses de España y del Cuartel General de la OTAN en Bétera, a pesar de las dificultades familiares y personales que ello suponga".

El próximo 28 de enero, coincidiendo con el décimo aniversario del HQ NRDC-SP, está previsto que se celebre el acto de fin de misión y disolución del contingente en Valencia, en el que participarán los 200 militares que han contribuido a la misión de Afganistán durante el 2012.