VALENCIA, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
Un total de 1.304 menores de 43 nacionalidades diferentes fueron atendidos por la Generalitat durante el primer semestre de este año 2008, de los cuales 483 fueron altas nuevas --180 en Alicante, 287 en Valencia y 16 en Castellón--. Además, la mayoría de los menores extranjeros procedían de Marruecos y Rumania, según informó hoy en un comunicado la Generalitat.
Asimismo, la directora general de la Familia, Carolina Martínez, indicó que los 483 menores correspondientes a nuevas altas atendidos representan una media de dos nuevos menores diarios. Entre los 43 países de diferente procedencia de los menores, destacan por el número de casos, Marruecos, con 152, y Rumania, con 112 menores, después ya con menos incidencia Ghana, con 45, y Argelia, con 24.
De este modo, de las 483 nuevas altas, el 91,5 por ciento correspondieron a menores que han estado acogidos por algún período en centros y un 8,5 por ciento en régimen de acogimiento familiar. La mayoría de estos menores, concretamente 390, el 80,7 por ciento, fueron varones y 93 mujeres, el 19,3 por ciento.
La edad mayoritaria se situó entre 16 y 18 años, aunque "algunos tienen más, y ocultan su edad", advirtió Carolina Martínez. Así, uno de los principales problemas detectados por los organismos involucrados, "es concretar la edad de los menores recién llegados", añadió Martínez.
También, subrayó "la masiva afluencia que en los últimos años ha sufrido la Comunitat Valenciana de menores extranjeros no acompañados que deben ser atendidos por el sistema de protección".
En este sentido, la directora de la Familia señaló que "los nuevos menores extranjeros se suman a los ya acogidos con anterioridad, provocando este año una situación de plena ocupación de plazas en toda la red asistencial de centros de protección de menores de la Comunitat", incluyendo tanto "los recursos residenciales específicos para menores extranjeros como los destinados preferentemente para menores españoles".
Por ello, Martínez destacó el "esfuerzo" del Consell para "ofrecer una atención adecuada a los menores que necesitan protección, para lo que la Generalitat ha incrementado en función de las necesidades los recursos de atención residencial y diurna y ha reforzado la calidad con la especialización y diversificación de los centros".
Concretamente, para dar respuesta al fenómeno migratorio de los menores extranjeros, "la Comunitat dispone de 13 centros específicos para menores extranjeros del sistema de protección con un total de 141 plazas residenciales". No obstante, la atención residencial se realiza también en cualquiera de los centros de la red de protección, especialmente en Centros de Recepción.
Paralelamente a la atención que los menores reciben en la red de centros de la Generalitat, la Conselleria de Bienestar Social ha subvencionado en los últimos años a la Asociación Valenciana de Ayuda al Refugiado (AVAR) un programa de atención integral a menores con el objetivo de atender a menores extranjeros en centros de la Generalitat.
Entre las actividades que se desarrollan con esta iniciativa para facilitar la integración en los ámbitos escolar, residencial y social, se presta asesoramiento legal, enseñando la lengua española y la contextualización cultural, apoyo al desarrollo psicosocial, actividades de salidas los fines de semana y tiempo libre.
Los menores extranjeros también son beneficiarios de los programas de inserción laboral para menores del sistema de protección que financia la Conselleria de Bienestar Social.
PROTOCOLO DE ACTUACIÓN
Respecto al protocolo de actuación con los menores, la directora general de la Familia explicó que cuando los menores son detectados son atendidos, en un primer momento, en un centro de primera acogida, "con el objeto de proceder al estudio de su situación personal, social y familiar, y de su entorno, para elaborar la correspondiente propuesta de medida de protección".
Estos centros son establecimientos residenciales abiertos, de atención inmediata y transitoria, de carácter integral de acogida a niños y adolescentes en el momento den que se produce la necesidad por razones de desprotección.
En estos casos, según indicó Carolina Martínez, la Conselleria de Bienestar Social comunica la situación a la Fiscalía de Menores y a la Subdelegación de Gobierno, "con el propósito de facilitar el reagrupamiento familiar siempre que sea posible, o en su defecto articulando medidas de procesos de inserción intensivos".
También matizó que la Generalitat presta a los menores extranjeros "la misma atención que a los menores nacionales", pero, primando en su condición de inmigrantes, "la realización de programas que faciliten su integración social, cultural y laboral, procurando respetar al mismo tiempo su idioma, su religión y sus hábitos culturales", resaltó Martínez.