Cannes abraza 'El Castor' de Jodie Foster y el ausente Mel Gibson

Jodie Foster En Cannes
GETTY
Actualizado: martes, 17 mayo 2011 18:02

CANNES, 17 May. (EUROPA PRESS) -

'The Beaver' ('El Castor'), la cinta dirigida por Jodie Foster y protagonizada por Mel Gibson y que aborda en con ironía los problemas mentales, recibió una cálida acogida en el festival de Cannes. Buenas sensaciones que pueden darle a la cinta una segunda oportunidad con el público en Europa, tras el fiasco que supuso su paso por la cartelera estadounidense.

La película, protagonizada por Gibson en su primer papel importante después de una serie de escándalos que mancharon su reputación en Hollywood, tropezó en su fin de semana de estreno en Estados Unidos con una recaudación de poco más de 100.000 dólares (unos 70.000 euros) en entradas.

Pero los críticos de Cannes, donde las películas introspectivas o psicológicas suelen funcionar mejor que en ningún otro sitio, rieron sonoramente en varios momentos de la proyección. Los aplausos finales fueron el mejor de los diagnósticos.

'The Beaver', que no compite por la Palma de Oro a la mejor película, oscila entre la comedia y el drama mientras sigue al personaje de Gibson -un jefe de empresa golpeado por la depresión- a través de una terapia radical para recuperar su salud mental.

Utilizando un castor con acento de obrero londinense como marioneta de ventrílocuo, el personaje de Gibson se enfrenta a un cambio radical en términos de salud mental mientras remodela su empresa de juguetes, recupera los lazos con su esposa y comienza su vida de nuevo.

En su paso por Cannes, Foster ha defendido a Gibson como actor y profesional, restando importancia a sus problemas personales después de que aparecieran grabaciones del cineasta en una divagación antisemita y el maltrato a su ex mujer.

SOBRESALIENTE PARA GIBSON

"Es un actor sobresaliente: puede hacer el lado cómico y el lado oscuro", dijo Foster, de 48 años y que ha dirigido cuatro películas contando ésta última. "Sobre todo, entiende la lucha de ese personaje (...) Él es alguien que quiere cambiar, que no quiere ser él mismo. Eso es parte de Mel", afirmó la directora.

Al preguntarle cómo había sido dirigir a Gibson, que atravesaba problemas en su vida privada durante el rodaje, Foster le describió como "el actor menos neurótico" con el que ha trabajado y alguien dispuesto a descubrirse a sí mismo en cada trabajo.

En la película, el personaje de Gibson empieza en el fondo de una depresión clínica, bebiendo hasta aturdirse antes de intentar ahorcarse de la barra de cortina de la ducha, y caer en la bañera enredado en la cortina.

Con su complejo y sombrío tema y su irónico sentido del humor, la película no logró encontrar un público en Estados Unidos, pero su productor Keith Redmon dice que aún tiene esperanzas de éxito en DVD y en otros canales de venta.

"No es sólo la taquilla, hay muchas formas de recuperar una película", dijo. "Sabemos que será una cuestión de tiempo más que sólo el primer fin de semana.

Por su parte, Foster eludió por completo la pregunta sobre el dinero. "He aprendido", dijo "que si pones toda tu autoestima en la taquilla serás una persona muy miserable