La acusación ve el "abuso de confianza" de Castiñeiras un "agravante" y pide que "no se enjuicie al Cabildo"

Actualizado: jueves, 5 febrero 2015 12:36

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 5 Feb. (EUROPA PRESS) -

La acusación particular en la causa por el robo del Códice Calixtino, que representa a la Catedral de Santiago, ha criticado el "abuso de confianza" demostrado por el principal acusado, José Manuel Fernández Castiñeiras, a la hora de sustraer objetos de la Catedral y ha pedido que "no se enjuicie al Cabildo, a la víctima" por las escasas medidas de seguridad presentes en la basílica.

Así lo ha indicado el abogado de la acusación, José Antonio Montero, en la undécima y última jornada del juicio, en la que ha elevado a definitivas sus conclusiones provisionales y ha mantenido las penas que reclama para los acusados.

En su intervención, el letrado ha manifestado que cree que el "abuso de confianza" demostrado por el exelectricista es un "plus de culpabilidad", dado que provocó que su presencia no levantase sospechas y se benefició de la información que disponía de la gestión de la Catedral.

Al mismo tiempo, ha pedido que "no se enjuicie al Cabildo" por su decisión de no denunciar la falta de dinero en las cuentas, ya que, ha apuntado, sus miembros han sido "educados" en ideales "éticos" de "perdón".

La acusación cree que los delitos han sido "continuados" y considera "acreditado" que fueron cometidos por Fernández Castiñerias, que empleó para ello llaves que había conseguido de forma ilícita --"falsas llaves", las ha denominado--. Sobre el Códice, descarta que la sustracción se produjese por un "descuido" y cree que se hizo con "ánimo de vengarse" del exdeán José María Díaz.

OTROS ACUSADOS

Sobre la mujer e hijo, la acusación mantiene la petición de penas, ya que cree que, a pesar de lo declarado, ellos debían sospechar del origen del dinero con el que pagaron la vivienda dado que "Manuel no trabajaba".

No obstante, oída la grabación de la vivienda, ha dejado la puerta abierta a que pudiesen desconocer lo que hacía su marido y padre teniendo en cuenta su "nivel cultural". "Es una cuestión que podemos reconocer a infantas, políticos y banqueros", ha recordado el letrado, que considera esta decisión una "labor difícil para el tribunal".