MADRID, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El general renegado Laurent Nkunda, líder del Congreso Nacional para la Defensa del Pueblo (CNDP), un grupo de rebeldes tutsis, amenazó hoy con enviar a sus combatientes a la ciudad de Goma, capital de Kivu Norte, a menos que la Misión de la ONU en la República Democrática del Congo (MONUC) garantice el alto el fuego y la seguridad, tras los incidentes registrados durante la noche, mientras los diplomáticos extranjeros se esfuerzan por mantener la paz en la frontera del país africano con Ruanda y buscar una solución al conflicto.
Un número indeterminado de militares incontrolados del Ejército de la República Democrática del Congo (RDC) mataron anoche a nueve civiles, hirieron a otros tres, violaron a tres mujeres y saquearon numerosos comercios, viviendas, farmacias y restaurantes en la ciudad, a cuyas puertas ya se encuentran las milicias de Nkunda.
Según informaron testigos presenciales, durante toda la noche se escucharon muchísimos disparos, horas después de que Nkunda declarara un alto el fuego en el avance de sus tropas hacia la ciudad. Además, el portavoz de la MONUC Kevin Kennedy declaró por su parte que mientras que el alto el fuego se mantiene en Kivu Norte, el Ejército congoleño se "está volviendo loco" en algunas zonas de Goma.
"Hemos pedido a la MONUC que garantice la seguridad de la ciudad", declaró Nkunda a Reuters por teléfono vía satélite, añadiendo que los soldados de la ONU no han impedido que se haya matado a civiles congoleños y saqueado la ciudad por parte de las tropas gubernamentales.
"Entraremos en Goma si no hay un alto el fuego, no hay seguridad y no se avanza en el proceso de paz", añadió. Nkunda, que declaró a última hora de ayer un alto el fuego después de que sus fuerzas llegaran hasta los alrededores de Goma, dijo que hablaba desde su cuartel general en Kirolirwe, en el este de la RDC.
ALTO EL FUEGO
Según la emisora de la MONUC, a lo largo de esta mañana no se han registrado combates en Kivu Norte, donde las milicias de Nkunda ya se encuentran en las puertas de Goma. Los oficiales del Ejército de la RDC han confirmado que esta mañana no hubo enfrentamientos entre sus tropas y el CNDP. Por su parte, el portavoz de los rebeldes aseguró que su movimiento sigue respetando el alto el fuego unilateral anunciado anoche.
Nkunda, que ha asegurado que lucha para proteger a la minoría tutsi del país, rechazó una vuelta al proceso de paz "demasiado dominado por el Gobierno del presidente Joseph Kabila", que fue firmado en enero en Kivu Norte, y reiteró que está dispuesto a iniciar un proceso de paz, pero con la intervención de un mediador neutral.
DESPLAZADOS
La amenaza de las milicias tutsis se produce cuatro días después de la ofensiva de los rebeldes del general renegado, que obligó a miles de civiles a huir de la provincia de Kivu Norte, lo que ha alimentado los temores de que se repita la guerra que azotó entre 1998 y 2003 al país africano.
Durante la noche también se produjo un éxodo de tutsis en dirección a la ciudad ruandesa de Gisenyi, cerca de la frontera, temiendo represalias, al ser también tutsi el general Nkunda. "Todos los tutsis han cruzado. La gente no se siente a salvo", explicó John Kanyoni, un empresario tutsi, en conversación telefónica con Reuters desde Gisenyi.
Por otro lado, el portavoz del CNDP anunció hoy la creación de un corredor humanitario en el este del país para ayudar a los desplazados, mientras algunas ONG internacionales han procedido a la evacuación de su personal expatriado como precaución.
El portavoz del CNDP, Bertrand Bisimwa, precisó que el objetivo del corredor humanitario es facilitar el regreso a sus hogares de todas las personas que han huido de sus hogares a causa del incremento de la violencia en la provincia de Kivu Norte y permitir a las agencias humanitarias hacer llegar sus ayudas a los desplazados.
PERSONAL HUMANITARIO
Ayer, el personal civil de la ONU fue trasladado desde Goma hasta un recinto situado a la orilla del lago Kivu. Además, un cooperante de la ONG Save the Children indicó que han trasladado a todo el personal expatriado a Gisenyi, en Ruanda, junto a la frontera. "Pero hemos intentado mantener una actividad mínima en Goma", dijo.
En Kivu Norte hay aproximadamente un millón de desplazados internos y muchos están en esta situación desde hace meses o incluso años. El recrudecimiento de los combates desde el pasado mes de agosto forzó la huida de 250.000 personas, la mayoría de las cuales han sido desplazadas en varias ocasiones.
Aunque la mayoría de ellos se encuentran dentro de las fronteras congoleñas, en Ruanda ya hay algunas ONG esperando su posible llegada, entre ellas Cruz Roja Española, que trabaja en la zona en colaboración con la Cruz Roja Ruandesa.
PRESIÓN DIPLOMÁTICA
Por otro lado y ante el aumento de las tensiones, la ONU, la Unión Europea y Estados Unidos han presionado a Ruanda y a República Democrática del Congo para que terminen con las disputas en la frontera común, a la vez que la Presidencia francesa de la UE presiona para el despliegue de una fuerza europea.
El Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común de la Unión Europea, Javier Solana, conversó esta mañana por teléfono con Kagame acerca de la situación en el este del país africano. Además, el comisario de Desarrollo y Ayuda Humanitaria, Louis Michel, se reunirá mañana con Kabila, para intentar terciar en el conflicto.
Solana ha mantenido conversaciones en los últimos días con Kabila, con el secretario general de la ONU, Ban Ki Moon, así como con personas "del entorno" del propio Kagame. "Esto ayudará sin ninguna duda a iniciar un proceso político que es absolutamente necesario", indicó en un comunicado.
Por su parte, Michel se desplazó a Ruanda después de haber mantenido una entrevista hoy con Kabila, explicó el portavoz de Michel, John Clancy. "Necesitamos urgentemente un alto el fuego para detener el caos y el sufrimiento de las personas corrientes", indicó el comisario en un comunicado.
Además, el ministro francés de Asuntos Exteriores y presidente de turno del Consejo Europeo, Bernard Kouchner, que propuso ayer el envío de 1.500 tropas de la UE, indicó hoy que la Unión estudiará en los próximos días el envío de una fuerza humanitaria. Aun así, el diplomático aseguró que Alemania se opone al envío de tropas.
Ban, quien ayer alertó de que el recrudecimiento de la violencia en la RDC está generando una crisis humanitaria de "proporciones catastróficas", ha enviado a dos representantes a ese país y a Ruanda para mediar en esta crisis.
Además, la secretaria de Estado Adjunta estadounidense para Asuntos Africanos, Jendayi Frazer, también se encuentra en Kinshasa para reunirse con Kabila. "Está allí para promocionar una solución pacífica al conflicto", indicó el portavoz del Departamento de Estado, Robert Wood.
Mientras, la fuerza paz de la ONU, de 17.000 cascos azules, planea ampliar sus tropas en Goma, actualmente con 800 efectivos, con soldados de otras partes del país, anunció ayer el embajador británico ante Naciones Unidas, John Sawers. "Estamos hablando de una misión que está absolutamente al límite", afirmó por su parte el portavoz de la MONUC. En las próximas semanas se va a estudiar además la petición del jefe de la Misión, Alan Doss, para un incremento temporal de la fuerza en aproximadamente 2.000 soldados.
