LISBOA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, ha defendido la necesidad de contar con un escudo antimisiles para defender a los países de la OTAN de la "amenaza" que representa Irán, según destacó en su comparecencia durante 61 cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que ha arrancado en Lisboa, donde los miembros de la Alianza Atlántica van a acordar la dirección que seguirá la organización en los próximos 10 años.
Sarkozy se ha referido explícitamente a la República Islámica, a pesar de las reticencias de Turquía a la hora de incluir a Teherán en las advertencias sobre un hipotético ataque con misiles. En este sentido, los líderes de la OTAN habían evitado nombrar explícitamente a Irán hasta las declaraciones de Sarkozy.
El sistema planteado contempla la colocación de interceptadores en barcos en el Mediterráneo a partir de 2011, para proseguir con interceptadores terrestres en Rumanía, en 2015, y en Polonia, a partir del año 2018. Estados Unidos discute también la colocación de un radar en Turquía, pero Ankara aún no ha dado una respuesta definitiva.
"Irán es la amenaza", declaró Sarkozy, quien consideró que "si algún día tiene lugar un ataque con misiles, sería deseable que pudiéramos interceptarlo". Para el presidente galo, el proyecto de la OTAN coincide con los deseos de París, que ha reiterado en numerosas ocasiones que el sistema de defensa debe ser definido de manera multilateral, y con la cooperación y beneplácito de Rusia.
En este sentido, Sarkozy destacó la necesidad de trabajar estrechamente con Moscú, "en el marco de una relación tranquila y con confianza", según declaraciones a los medios de comunicación.
