MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Fiscalía de Madrid solicita ocho años de prisión para el policía nacional José Luis A.G., destinado en la Comisaría de Carabanchel como jefe de equipo del indicativo K, por los delitos de robo con fuerza y falsedad de documento oficial debido a que presuntamente sustrajo en junio de 2006 efectos de un detenido y tachó del libro de custodia de objetos las pertenencias robadas.
En la primera sesión del juicio, el procesado negó estos extremos, alegando que "en ningún momento" tuvo acceso al armario donde se guardan las pertenencias. Además, recalcó al tribunal de la Audiencia Provincial de Madrid que el libro que registra los efectos de los arrestados está al alcance de "cualquiera de los agentes de la Comisaría". "Es habitual que los compañeros tachen anotaciones y sigan escribiendo en la misma hora", apuntó.
En el momento de los hechos, este agente estaba siendo investigado por la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (Udyco) por tráfico de drogas en relación a un alijo de cocaína que robó cuando estaba destinado en la Jefatura Superior de Policía de Valencia. En el marco de un operativo contra el agente, que se encuentra en prisión por esta causa, la Udyco se incautó en su domicilio de varios móviles robados, entre ellos uno que pertenecía a un detenido en la Comisaría de Carabanchel.
En su declaración, José Luis A.G. explicó que se encontró el móvil en su casa y decidió quedárselo. "Reconozco que tuve una actitud moral reprochable, la única. Lo encontré lleno de barro y sin tarjeta. Al final, me lo quedé", confesó.
Sin embargo, el Ministerio Público sostiene que el encausado se aprovechó el 1 de junio de 2006 de su posición para apoderarse de las llaves depositadas por funcionarios del servicio de seguridad en un despacho y procedió a abrir con ellas el candando del armario en el que se depositan los efectos personales de los detenidos. Así, se apoderó del teléfono móvil del detenido L.A.M., procediendo a tachar su registro del libro de custodia de detenidos.
El procesado explicó que la noche que se produjo el arresto de L.A.M., el jefe de la Policía Judicial le llamó para participar con otros agentes del indicativo K en el dispositivo de seguridad puesto en los calabozos de la Comisaría por la agresividad del detenido. "En todo momento, estuve pendiente del detenido porque estaba borracho. Tuve que calmarle verbalmente", relató.
Los compañeros del procesado indicaron a la Sección Cuarta que no vieron a José Luis A.G. robar ningún objeto de la bolsa de efectos. Tras escuchar el testimonio de varios agentes, la Sala acordó posponer, sin fijar fecha, la vista oral por la incomparecencia de un perito.
