CCOO critica que CSI-F recurre a la "confusión y la infamia" ante la "imposibilidad de explicar el por qué del acuerdo"

Actualizado: viernes, 18 febrero 2011 21:01

MURCIA, 18 Feb. (EUROPA PRESS) -

CCOO, UGT y STERM-Intersindical han considerado que las afirmaciones vertidas por CSI-F en las que se acusa a estas tres organizaciones de anteponer intereses particulares a los intereses de los empleados públicos, "no son más que una burda campaña para confundir y difamar ante la imposibilidad de explicar su firma y lo que verdaderamente han firmado" en el pacto sobre la Ley de Medidas Extraordinarias para la Sostenibilidad de los Fondos Públicos.

Los tres sindicatos contestan de esta manera a un comunicado interno que CSI-F ha transmitido a sus afiliados, en el que ha acusado a CCOO, UGT y Sterm-Intersindical de no firmar el pacto sobre la Ley de Medidas Extraordinarias para la Sostenibilidad de las Finanzas Públicas para "defender las subvenciones y liberados sindicales, así como las inmediatas elecciones sindicales y políticas", entre otras cosas.

Para CCOO, UGT y Sterm, CSI.F "recurre una vez más a la mentira y la demagogia para, utilizando los manidos y espurios argumentos de las subvenciones y los llamados liberados sindicales, crear una cortina de humo que tape sus propias vergüenzas y debilidades como organización que dice representar a los trabajadores, pero que no ha dudado ni un solo momento al estampar su firma en un acuerdo que supone una traición a los principios que desde el primer momento han impulsado el movimiento de los empleadas y empleados públicas murcianos contra el 'tijeretazo del Gobierno regional".

Ante esta "sarta de insidias", CCOO, UGT y Sterm dicen "verse en la obligación" de recordar que los permisos sindicales "son un derecho de los trabajadores y trabajadoras y no un derecho de los dirigentes sindicales".

Así, dice que se trata de "un recurso para hacer efectivos los derechos de negociación, información, defensa jurídica y asesoramiento, de forma que son públicos y el trabajo de las personas que los tienen, también".

Por ello, reclaman que "si CSI-F tiene personas con permiso que no hacen su trabajo, que utilizan las horas para su propio beneficio, que los echen; asimismo, si conocen personas liberadas bajo cuerda, que lo denuncien".

Igualmente, recriminan que CSI-F, "a estas alturas, aún no ha renunciado a las subvenciones que recibe tanto del Gobierno regional como del central; se predica con el ejemplo".

Por todo ello, acusan a CSI-F de "utilizar la mentira y el insulto alineándose con quienes quieren acabar con el sindicalismo como instrumento de organización y defensa de los trabajadores y trabajadoras, situándose en el terreno de quienes lo utilizan como instrumento de sumisión a los gobiernos y la patronal".

"Esa ha sido la posición de CSI-F a lo largo de estas negociaciones: la sumisión, cuando no la de actuar como asesoría del Gobierno regional y de freno a las reivindicaciones y movilizaciones de los empleados públicos", critican los tres sindicatos.

Para ellos, se trata de un papel "que no debe haber sido difícil de desempeñar para alguien que durante varios años ha ejercido de director general de Función Pública apoyando políticamente al Gobierno regional".

"CSI-F ha elegido la senda de la sumisión y del apoyo a un Gobierno que ha perpetrado uno de los mayores ataques a los derechos sociales y laborales de sus propios trabajadores; le han dado, ellos y los demás sindicatos firmantes, un cheque en blanco a Valcárcel esperando, quizá, inconfesables réditos políticos", concluyen.