ARRECIFE (LANZAROTE), 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de España no se ha puesto en contacto telefónico con Aminetu Haidar "ni siquiera" para saber su estado de salud desde hace diez días, según ha lamentado este martes el portavoz de la Plataforma de Solidaridad con la activista saharaui, Guillermo Toledo.
En declaraciones a Europa Press, Toledo ha reprochado al Ejecutivo que preside José Luis Rodríguez Zapatero que no haya mostrado "un mínimo de interés por su salud desde hace 10 días".
"Hace diez días que no llaman, no sabemos nada del Gobierno español, como si no hubiera una mujer en peligro de muerte desde hace 30 días. Ése es el concepto que tienen de los derechos humanos, de la justicia", criticó el actor, que confesó sentir "vergüenza de este gobierno".
"UN PUEBLO TIRADO EN UN CUARTUCHO"
Dijo, además, que la situación de la activista que permanece en huelga de hambre desde hace 30 días en el aeropuerto de Lanzarote es un reflejo de lo que pasa en el Sáhara Occidental: "Un pueblo tirado en un cuartucho de un aeropuerto con la indiferencia de los que gobiernan en el mundo".
Guillermo Toledo insistió en que los derechos humanos son "pisados diariamente" en el mundo en favor de "los intereses de unos pocos, que no son el interés general". Recordó que el Ejecutivo español tardó 12 días en ponerse en contacto la primera vez, "luego vino" el director del gabinete del Ministerio de Asuntos Exteriores y de Cooperación "que montó lo de la avioneta, diciéndole a Aminetu que estaba resuelto" y para eso, "mejor no vengan", aseveró.
Toledo reconoció que no sabe qué va a suceder con la defensora de los derechos humanos, pero insistió en que si al final fallece no será sólo ella la que saldrá perdiendo, "sino también la justicia". Para el actor, ella está cada día más cansada, aunque no se queja de nada porque no quiere que se preocupen.
Asimismo, el portavoz de la Plataforma asegura que ella va a continuar con su acto de protesta. Igualmente, a la Plataforma le duele la "incompetencia" del Gobierno y su falta de respuesta para la activista 'encarcelada' en el aeropuerto de Lanzarote.
