El lehendakari, dispuesto a abrir un diálogo con ETA "para la paz y la convivencia"

Iñigo Urkullu
JON BERNARDEZ/LEHENDAKARITZA.
Actualizado: viernes, 28 febrero 2014 11:53

Insta a ETA a dar "pasos acelerados" hacia su desarme total y al Gobierno del PP a que se implique sin contraprestaciones

BILBAO, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha afirmado que está dispuesto a abrir un diálogo con ETA si es para lograr la paz y la convivencia", y ha recordado que todos los Ejecutivos centrales, a excepción del de Mariano Rajoy, han mantenido contactos "directos o indirectos" con la banda, pese a que, entonces, asesinaba.

Además, ha instado a ETA a dar "pasos acelerados" hacia su desarme total y al Gobierno del PP a que se implique "sin contraprestaciones" en el proceso, y ha asegurado que el Ejecutivo vasco no plantea "una amnistía velada" como la de Irlanda del Norte.

En una entrevista concedida a la Cadena SER, recogida por Europa Press, Urkullu ha recordado el Pacto de Ajuria Enea, que en su punto décimo subraya que, "si hay voluntad inequívoca por parte de ETA de poner fin a la violencia, se habilita el diálogo con la propia organización terrorista".

Por ello, se ha preguntado por qué, "si todos los gobiernos democráticos del Estado español han podido mantener un diálogo directo o indirecto" cuando ETA mataba, "¿por qué ahora, en el año 2014, cuando llevamos dos años y medio de cese definitivo de la acción armada, cuando hay una voluntad manifestada de dar pasos hacia el ejercicio de la democracia, de desandar por parte de ETA y la izquierda abertzale un camino equivocado que nunca debieron haber tomado, no es posible el diálogo?".

El presidente del Gobierno vasco ha querido "matizar" las calificaciones de "espectáculo o teatralización" que se han realizado del acto de entrega de armamento por la banda, y ha considerado que es "la puesta en público de una voluntad que nunca se había dado por parte de ETA de la entrega de las armas".

"Me parece más importante lo cualitativo que lo cuantitativo. No creo que sea una cuestión en la que debamos enredarnos sobre lo que pudiera ser el arsenal que aparecía en la mesa o cómo se lo llevaron", ha señalado.

En este contexto, ha asegurado que confía en la Comisión Internacional de Verificación (CIV), compuesta por "gente experimentada". "Lo que ha quedado claro es que ha habido un proceso de sellado y de dejar fuera de uso operativo determinado arsenal como un paso dentro de ese proceso unilateral, incondicionado, y con la mirada puesta en el desarme total", ha destacado.

Iñigo Urkullu ha insistido en que "el propio mensaje de la CIV era que el arsenal que allí se expuso quedaba sellado y fuera de uso operativo". "Yo creo en la palabra de los verificadores, que han estado con ETA, y creo en la palabra de ETA en la medida en que éste es un gesto inédito porque nunca en más 50 años de historia de ETA se había dado un paso de entrega voluntaria de una parte de las armas, del arsenal", ha añadido.

En esta línea, ha admitido que le parecen "pocas" las armas selladas, y ha insistido en que "es un pequeño paso, no suficiente". "Pero es un paso, y tiene que venir acompañado de pasos más acelerados por parte de ETA en el desarme total", ha aseverado.

Sobre el sms que Urkullu remitió al presidente del Gobierno del PP, Mariano Rajoy, antes de comparecer tras el anuncio de los mediadores internacionales, ha destacado que él hace "honor" a lo que es su responsabilidad y se dirigió a los principales líderes políticos en el Estado y también en Euskadi, "de manera absolutamente honesta", para relatarles lo que iba a decir.

"Lo hice tanto después de conocer la comunicación de la CIV como también al conocer que estaban citados a declarar ante la Audiencia Nacional", ha indicado.

También se ha referido "al silencio" de Mariano Rajoy ante todos estos hechos, y ha indicado que observa "una diferencia entre la actitud del presidente del Gobierno español y las verbalizaciones del ministro de Interior y también con la actitud del PP, por lo menos, de su secretaria general", María Dolores de Cospedal, y de alguno de los portavoces de los populares.

A su juicio, la actitud de Rajoy "ha sido mucho más medida" y confía en que "esto sirva también para que se pueda trabajar conjuntamente" entre los Gobiernos español y vasco.

FINAL ORDENADO

En esta línea, ha vuelto a reclamar "la necesidad de un final ordenado" de ETA porque no se trata solo de la disolución, "que es el estadio final" de la desaparición "definitiva" de ETA, porque esto tiene "su complejidad legal, técnica, y otros ámbitos en los que hay trabajar".

"Por eso yo planteo un final ordenado, reglado, que tenga un guión claro, consensuado también entre el Gobierno español y el Gobierno vasco, además de con formaciones políticas, para que ese final ordenado esté asentado sobre un principio de desarme total, incondicional, verificable, contrastable, y que tenga el elemento del reconocimiento del daño injusto causado", añadido.

De esta forma, ha señalado que, además, tiene que "tener la mirada puesta en la reparación a las víctimas provocadas por el terrorismo", y en una aplicación de la política penitenciaria "en base a la legislación existente, pero con la mirada puesta en el final del terrorismo".

"Estamos hablando de llevar a la mente de todos los ciudadanos que no estamos en una política antiterrorista, sino que tendríamos que estar hablando de un plan 'de paz por paz y para la convivencia'. Y que eso necesita también del concurso consensuado de las formaciones políticas", ha apuntado.

LA IMPLICACIÓN DEL GOBIERNO

El lehendakari ha instado al Gobierno español "a implicarse en esta interpretación" de cómo llegar "a este final del terrorismo, teniendo como objetivo la disolución de ETA".

En su opinión, las declaraciones Rajoy preguntándose por qué tiene que dar "algo a cambio" de la disolución de ETA o de su desarme, no son, "en absoluto, una respuesta" al Plan de Paz que él le ha presentado o a los planteamientos que le ha traslalado en materia de política penitenciaria. "No tiene nada que ver lo que dijo el presidente del Gobierno español en el debate del estado de la nación en respuesta al portavoz del Grupo Vasco", ha añadido.

En todo caso, ha explicado que él ha pedido a Rajoy "que, en aquellas iniciativas en las que sea necesario, el Gobierno español coparticipe con el Gobierno vasco". "Pero esa respuesta del presidente del Gobierno español entiendo que es una respuesta que no se corresponde con este planteamiento", ha asegurado.

En esta línea, ha manifestado que nadie pide que se de "dé nada a ETA, nadie está planteando un ejercicio de contraprestación o compensación", sino "un consenso entre el Gobierno vasco y el español de algo que debería ser una política de Estado".

A su entender, Mariano Rajoy "podría hacer más también en aras a la convivencia desde una interpretación penitenciaria diferente, que, incluso en el año 98, el Gobierno del PP la definió como más consensuada, dinámica y orientada". "Y no tiene nada que ver con contraprestaciones a una organización terrorista, que lo es, y a la que exigimos su final definitivo", ha dicho.

Para el lehendakari, es necesario abordar "el final de una organización terrorista que tiene un arsenal de armas y explosivos", y que puede "terminar con la destrucción" del armamento, pero se debe analizar si, "para eso, hace falta una legislación específica o no, cómo se puede proceder a la destrucción de armas que quizá hayan sido utilizadas en comisión de atentados por esclarecer".

Por ello, reivindica "un final ordenado" para "conducir todos este proceso" hacia el fin de ETA, desde su disposición "al desarme total, unilateral, incondicionado y verificable".

Sobre el planteamiento de Reino Unido, que habría garantizado a casi 200 activistas del IRA que no les iba a perseguir por sus delitos, ha considerado que es "una amnistía velada". "No es eso, desde luego, lo que estamos planteando desde el Gobierno vasco", ha asegurado.

Leer más acerca de: