VALENCIA, 30 Oct. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente y portavoz del Consell de la Comunitat valenciana, Vicente Rambla, señaló hoy la posibilidad de solicitar al Consejo de Ministros que disuelva la corporación local del municipio de San Fulgencio (Alicante) --donde ha sido detenida la alcaldesa y otros miembros de la institución-- en caso de que el Consistorio "no tuviera capacidad de ser gobernado". No obstante, apuntó que esta solución se daría en el "último caso" y matizó que "ahora es muy prematuro valorarlo".
Rambla se expresó de esta manera en los pasillos de las Corts en relación a la detención de la alcaldesa de San Fulgencio, la socialista Trinidad Martínez, y cuatro ediles en relación a una trama urbanística tras ser preguntado si el Consell contempla la posibilidad de pedir al Consejo de Ministros que disuelva el Ayuntamiento y nombre una comisión gestora.
El portavoz del Gobierno valenciano indicó que habrá que "esperar a ver" cuáles son los cargos y las imputaciones que se realicen sobre la alcaldesa y, posteriormente "ya se vera cuál es la situación en que queda la Corporación municipal y la viabilidad de que el Gobierno municipal de San Fulgencio pueda continuar".
En caso de que las circunstancias se desarrollen con "normalidad", aseguró que "no se plantearán mayores problemas, pero si no fuera así, se puede llegar hasta la última instancia que es que se declara por parte del Consejo de Ministros la disolución de la Corporación municipal".
"Ese sería el estadio último y depende de la evolución de los acontecimientos, las imputaciones de cargos que realice el fiscal y la gobernabilidad del ayuntamiento", subrayó.
En este momento, "todo esto hay que valorarlo con la debida prudencia porque estamos en la primera fase de esta instrucción que puede afectar a algún miembro más del Gobierno local y de ello dependerá su gobernabilidad", manifestó Rambla, quien reiteró que se nombrará una gestora si el Ayuntamiento "no tuviera capacidad de ser gobernado".
Pero, hasta que el Ministerio Fiscal haya manifestado las imputaciones o no que correspondan a la alcaldesa, "no será momento de hacer nuevas valoraciones", apostilló.
Rambla consideró que de momento "es muy apresurado hablar de una gestora en un Ayuntamiento por estas circunstancias" y que "lo razonable y lo prudente es ver los cargos y las imputaciones del Fiscal, no sólo a la alcaldesa sino a otros miembros de la Corporación y valorar el impacto que eso tiene en el Ayuntamiento y, a partir de ahí instar a todas las medidas que correspondan que, en último caso podría llegar a ser la disolución del Ayuntamiento". Pero, "ahora es muy prematuro valorarlo", añadió.
El portavoz del Consell, preguntado por si le preocupa al Gobierno valenciano los "casos de corrupción urbanística que están apareciendo en los ayuntamientos", aseguró que le preocupan los casos de corrupción "en cualquier ámbito de la política, independientemente del origen que lo rodeen".
Pero, en este sentido precisó que "no estamos hablando de problemas urbanísticos sino de problemas de corrupción de algunas personas" porque el urbanismo en la Comunitat "se ha ido desarrollando con normalidad, con criterios de sostenibilidad y aportando un desarrollo económico muy notable" y eso "nada tiene que ver con casos puntuales de responsables políticos que en estos momentos puedan estar imputados por esos casos de corrupción".
Así, Rambla apuntó que no quería "elevar a la condición de categoría lo que son casos puntuales en determinados municipios que nada tienen que ver con el normal desarrollo de un urbanismo en la Comunitat", concluyó.
