MADRID, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
Sus Majestades los Reyes, don Juan Carlos y doña Sofía, acompañados por los Príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia, presiden la tradicional Pascua Militar en el Palacio Real de Madrid, junto al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y la ministra de Defensa, Carme Chacón.
Esta ceremonia castrense instituida por Carlos III como muestra de reconocimiento a los Ejércitos suele servir al Rey y al titular de Defensa para hacer balance del año anterior y marcar retos futuros. Se celebra siempre un día después del cumpleaños del monarca, que ayer cumplió 71 años.
Los actos de la Pascua Militar arrancan en la Plaza de la Armería. Tras los correspondientes honores militares, Don Juan Carlos pasa revista a una formación de la Guardia Real y se traslada, acompañado por la Reina y los Príncipes, hasta el Salón Gasparini del Palacio Real, donde saluda a las diferentes autoridades políticas y militares que asistan a los actos.
Además del presidente del Gobierno y la ministra de Defensa, están presentes el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba --en representación de la Guardia Civil-- y la cúpula militar, con el jefe del Estado Mayor de la Defensa, José Julio Rodríguez Fernández y los jefes de Estado Mayor del Ejército de Tierra, general de Ejército Fulgencio Coll; del Aire, José Jiménez Ruiz y de la Armada, Manuel Rebollo.
También se espera la participación del secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez; la subsecretaria del Ministerio, María Victoria San José y el secretario general de Política de Defensa, Luis Cuesta.
Durante los actos de la Pascua Militar, el Rey, en su condición de jefe del Estado y capitán general de los Ejércitos y la Armada, impondrá condecoraciones a varios militares. Tras la imposición de las distinciones, llegará el turno de los discursos en el Salón del Trono con la intervención de la ministra de Defensa y del Rey. Por último, la Familia Real celebrará la tradicional recepción a las autoridades asistentes.
En su discurso de la Pascua Militar del año pasado, el Rey expresó su más "profunda y firme" condena a la "lacra abominable e inaceptable" del terrorismo, y tuvo un recuerdo especial para los dos guardias civiles asesinados por ETA el 1 de diciembre de 2007 en Capbreton (Francia).
