Católicos denuncian que tanto el fundamentalismo religioso como el "laicista" violan la libertad religiosa

Actualizado: sábado, 19 noviembre 2011 21:43

MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Fundación Universitaria San Pablo CEU y la Asociación Católica de Propagandistas han concluido en el manifiesto final del XIII Congreso Católicos y Vida Pública que organizan y que se celebra hasta este domingo bajo el lema 'Libertad Religiosa y Nueva Evangelización', que, tanto el "fundamentalismo religioso" como "el llamado fundamentalismo laicista, violan gravemente la libertad religiosa".

En este sentido, han asegurado que ambos "fundamentalismos" suponen "el rechazo del legítimo pluralismo y del principio de laicidad e impiden una pacífica convivencia sociopolítica democrática, abriendo la puerta a totalitarismos de uno u otro signo".

Así, han denunciado y condenado la "aberración" a la que llegan algunos creyentes que invocan a Dios para justificar su terrorismo y sus crímenes, así como "otras formas de hostilidad contra la religión, expresión de un laicismo intolerante, que limitan el papel público de los creyentes en la vida civil y política".

En esta línea, aunque reconocen "con vergüenza" que en el pasado se cometieron algunos "actos de violencia" en nombre de la fe cristiana, han apuntado que, en la actualidad, son los cristianos los que "en mayor número ven violada su libertad religiosa" y sufren "la más violenta persecución en todo el mundo".

A su juicio, la libertad religiosa no se encuentra "en ninguna parte plenamente respetada" y se vulnera "hasta el extremo en no pocos lugares" hasta el límite de poder llevar a la muerte y "de modo especialmente grave cuando se instrumentaliza la religión a favor del poder e intereses propios de un individuo o un grupo".

"El respeto a la libertad religiosa, derecho fundamental radicado en la dignidad de la persona, exige que, en materia religiosa, a nadie se le obligue a obrar contra su conciencia, ni se le impida actuar conforme a ella en privado y en público, sólo o asociado con otros", han recordado, al tiempo que han puntualizado que este derecho "debe tener su expreso reconocimiento como derecho civil en todo ordenamiento jurídico positivo y es imprescindible en un verdadero Estado de derecho".

Por ello, en el manifiesto exigen "el riguroso respeto a la libertad religiosa, como un derecho ciudadano constitucionalmente reconocido" y rechazan "cualquier intento de restringir su efectivo ejercicio bajo el pretexto de regularlo". Igualmente, reclaman que se reconozca "expresamente" la dimensión pública de la religión "a la vez que se respeta la laicidad positiva de las instituciones estatales".

Además, han expresado su deseo de que la libertad religiosa se haga eficaz en la consolidación de la familia, "fundada en la unión de un hombre y una mujer", en el respeto a la libertad educativa y en la defensa del derecho de los padres "a decidir el tipo de educación que han de recibir sus hijos" y han subrayado la necesidad de la libertad religiosa "como condición para la evangelización de la cultura" y en el ámbito de los medios de comunicación.

Finalmente, han proclamado su compromiso con la evangelización a la que urge la Iglesia, en la tarea de transmitir el Evangelio "tanto a quienes no les ha sido anunciado" como "especialmente, a quienes lo recibieron en sociedades y culturas que desde hace siglos estaban impregnadas del Evangelio y se han ido alejando de la fe" hacia una sociedad "secularizada".