VALENCIA, 20 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) ha mostrado este domingo su temor a que la nueva norma que obliga al examinador de Tráfico a comunicar oralmente la nota al examinado al final de la prueba aumente el número de agresiones a estos trabajadores.
En un comunicado, el sindicato ha aconsejado a los examinadores de Tráfico que trasladen las notas a los alumnos en las puertas de comisarías o de cuarteles de Guardia Civil "si perciben cualquier riesgo de agresión". En 2012 se contabilizaron un total de nueve agresiones en el conjunto del país.
La nueva instrucción obliga al examinador a comunicar la nota al afectado en cuanto acabe la prueba y darle "una explicación breve y clara sobre el resultado, sin entrar en discusión". Hasta ahora la nota la trasladaban a la autoescuela que, a su vez, la transmitía al examinado.
CSI·F ha alertado de que "la precariedad económica ha elevado las situaciones de tensión" y "cada vez resultan más habituales los insultos o los malos gestos hacia examinadores durante la prueba, todo ello sin que el alumno sepa la nota", con lo que a partir de mañana la situación "se puede agravar".
En este contexto el sindicato aconseja a los examinadores que apliquen directamente el matiz de la instrucción que especifica que comunicarán la nota "en un entorno seguro" y sugiere que, "ante la mínima duda, se trasladen con los examinados a la puerta de la comisaría más cercana o del cuartel de la Guardia Civil más próximo y allí comuniquen la nota".
