Almería.- El obispo pide resistencia a la presión de los terroristas sobre la sociedad y las instituciones

Actualizado: viernes, 22 diciembre 2006 14:35

González Montes centra su mensaje de Navidad en la beligerancia de los sectores laicistas en España y el diálogo interconfesional

ALMERIA, 22 Dic. (EUROPA PRESS) -

El obispo de Almería, Adolfo González Montes, aseguró hoy que el terrorismo sólo puede ser vencido por el imperativo de la ley y la resistencia a cualquier presión de los terroristas sobre la sociedad y las instituciones democráticas.

En su tradicional mensaje de Navidad a la Diócesis de Almería González Montes, quien ocupa la Presidencia de de la Comisión de Relaciones Interconfesionales de la Conferencia Episcopal, hizo un amplio repaso de la situación social en España y en el resto del mundo "invadida", a su juicio, "por una cultura sin Dios" y centró una parte de su discurso a insistir en que el ordenamiento jurídico español exige una negativa contundente" de todos a secundar la voluntad de los terroristas, afirmó porque las leyes justas quedaría, en caso contrario, "sin razón moral".

El obispo de Almería lamentó profundamente lo que calificó como beligerancia de ciertos sectores laicistas de nuestra sociedad, prestos, según su criterio, a desacreditar la religión como de paz social y de cultura. González Montes acusó además a esos sectores de querer imponer la escala de sus propios valores con la misma intolerancia que dicen rechazar.

Por este motivo, llamó a la no aceptación de la privatización de las creencias, ya que, a su juicio, la verdadera convivencia en la tolerancia ha de tener en cuenta las creencias mayoritarias de los españoles, de legitimidad histórica y social indiscutible, así como las creencias de las minorías.

Desde su responsabilidad como presidente de la Comisión Episcopal de Relaciones Interconfesionales, concluyó echando en falta protección y defensa por parte de los organismos internacionales y las autoridades de los países cristianos para con la situación que viven las comunidades de esta confesión religiosa en los países de Oriente Próximo que calificó de "grave" porque, en algunos casos, exige la urgencia por salvar la vida.

Concretamente, hizo referencia a los territorios de Palestina, Israel y El Líbano donde las comunidades cristianas "viven permanentemente atrapadas entre las facciones y estados enfrentados".

Por último, González Montes reflexionó sobre el diálogo entre musulmanes y cristianos para el que reivindicó el mayor respeto a los derechos humanos y el uso sin coacción de la verdad que cada confesión religiosa cree honradamente poseer para, de este modo, llegar a encontrar vías de solución a los conflictos.