ROQUETAS DE MAR (ALMERÍA), 8 Jun. (EUROPA PRESS) -
La presidenta del Parlamento de Andalucía, Marta Bosquet, espera que el Consejo Andaluz del Pueblo Gitano en el que trabaja la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía sirva de "punto de interlocución" entre el Gobierno andaluz y el tejido asociativo para acabar con la "discriminación" de la comunidad gitana.
En declaraciones a los medios durante un encuentro con la Federación Gitana de Almería en Roquetas de Mar, la presidenta del Parlamento ha subrayado el peso de la comunidad gitana en Andalucía, que concentra el 40 por ciento de la que habita en España, esto es, "más de 350.000 andaluces". "Andalucía no se entendería sin la comunidad gitana ni la comunidad gitana sin Andalucía", ha asegurado.
En esta línea, ha apuntado que si bien hay una parte "totalmente integrada", existe también un número de personas "en riesgo de exclusión", por lo que ve necesario el trabajo de las asociaciones en colaboración con la Junta de Andalucía desde donde se trabaja por ese consejo andaluz para "tender puentes" y activar mecanismos para el fomento de la "igualdad, de la mujer, de la vivienda y la educación".
"Queda mucho trabajo por delante", ha afirmado Bosquet antes de ofrecerse a colaborar en la lucha contra la "exclusión" y la "discriminación", especialmente tras la época de confinamiento en la que "habrá gente que lo habrá pasado mal" ante la reducción de la actividad labora, puesto que muchos se dedican a la "venta ambulante, hacen actuaciones" y se da también "economía sobre todo sumergida".
En cualquier caso, la presidenta ha apostado por dar visibilidad a la comunidad gitana, para lo que ha recordado los actos que se celebran en el Parlamento andaluz. "Es importante porque muchas veces lo que se visibiliza, se conoce más y llevar a cabo en el parlamento es actos contribuye en mayor medida a esa visibilización para tomar conciencia de la discriminación", ha reflexionado.
