ALMERÍA, 25 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los municipios costeros de Almería se preparan para reforzar la vigilancia ante el inicio del periodo vacacional de Semana Santa, de modo que algunos de ellos como El Ejido o Vera han articulado un operativo especial que arranca este viernes y se mantendrá en los próximos días para garantizar la seguridad y el cumplimiento de las medidas 'anticovid'.
Fuentes del Consistorio veratense han indicado a Europa Press que en los últimos días ya se ha notado la llegada de foráneos a sus segundas residencias, aunque no en volumen "excesivo", gracias a los controles realizados por Policía Local junto al refuerzo del Grupo de Intervención, quienes han contado con la colaboración vecinal a la hora de detectar a personas llegadas de otras provincias y comunidades autónomas.
"Ya han sido varias las denuncias puestas por ese desplazamiento injustificado", ha afirmado en relación a los controles aleatorios efectuados que continuarán en los próximos días con la presencia de un servicio de vigilancia por la zona costera reforzado con dos 'quads'.
El concejal de Seguridad Ciudadana de Vera, Alfonso García, ha hecho un llamamiento a "la responsabilidad individual en el cumplimiento de todas las medidas, a disfrutar de los días festivos con responsabilidad y mucha prudencia, de manera que no tengamos que lamentar un repunte de la curva de contagios, como ya ocurrió en Navidad".
Las mismas recomendaciones ha efectuado el alcalde de El Ejido, Francisco Góngora, quien ha detallado que entre el 26 de marzo y el 4 de abril los policías de turnos ordinarios se verán reforzados con hasta 30 agentes en turnos extraordinarios con la finalidad de garantizar la seguridad y el orden en el municipio.
Así, en los turnos de tarde y de noche, que son los "más sensibles y de mayor actividad" debido al control de limitaciones, se reforzaran considerablemente, de manera que "habrá hasta 12 patrullas en el municipio en los días y horarios más significativos".
MOJÁCAR AUMENTARÁ SUS CONTROLES
Por su parte, el Ayuntamiento de Mojácar ha decidido triplicar el servicio de vigilancia policial con especial incidencia en los accesos al municipios para controlar la procedencia de los visitantes, ya que desde el pasado fin de semana se ha detectado un aumento de la afluencia de ciudadanos, especialmente en bares y restaurantes.
En este sentido, se han decidido retrasar hasta la medianoche el cambio de turno policial para evitar que coincida con la hora del 'toque de queda' y cierre de los establecimientos hosteleros, de modo que los agentes puedan controlar que "ningún rezagado" quede en la calle. El este dispositivo, que también contempla más vigilancia de las medidas 'anticovid' en el Paseo Marítimo durante el mediodía, contará con una mayor dedicación los fines de semana y el Viernes Santo.
La llegada de personas de fuera de la comunidad autónoma también se ha percibido ligeramente en Cuevas del Almanzora, donde el Consistorio también ha acordado coordinar un dispositivo de seguridad entre la Policía Local y la Guardia Civil para vigilar especialmente la proliferación de reuniones de más de cuatro personas en espacios cerrados y de seis al aire libre así como para garantizar que se cumplen los horarios comerciales.
Por su parte, desde el Ayuntamiento de Pulpí y el Ayuntamiento de Níjar no se ha percibido un aumento de personas llegadas de otras provincias o comunidades autónomas aunque abogan por intensificar la coordinación de sus plantillas de Policía Local con el resto de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
"No sé prevé mucho movimiento", ha valorado la concejal de Seguridad Ciudadana de Pulpí, María del Mar Sánchez, quien, de otro lado, sí considera que desde que bajaron las restricciones se ha notado una mayor ocupación de bares y terrazas los fines de semana sin que ello haya repercutido en llegadas de visitantes de fuera de la comarca en zonas netamente turísticas como San Juan de los Terreros.
En el mismo sentido se han pronunciado desde el Ayuntamiento de Níjar, donde tampoco han divisado, por el momento, mayor afluencia de personas en la zona de Aguamarga, donde se concentran la mayor parte de las segundas residencias del municipio.
