Actualizado 08/07/2010 19:28

El Cabildo de la Catedral de Sevilla realizará tres proyectos "muy importantes" en los próximos años

Catedral de Sevilla
EP

Finaliza "de forma simbólica" la restauración de la fachada de Poniente del edificio, tras "algo más" de cuatro años de obras

SEVILLA, 8 Jul. (EUROPA PRESS) -

El delegado ejecutivo de Administración y Patrimonio Catedral y presidente de la Fundación Forja XXI, Francisco Navarro, ha avanzado hoy que el Cabildo acometerá tres proyectos "muy importantes" en los próximos años en la Catedral de Sevilla, que son las restauraciones de la fachada de la calle Alemanes, la solería y el pavimento de la Capilla Real y el Retablo Mayor.

En rueda de prensa, Navarro, que ha presentado la conclusión "simbólica" de la fachada de Poniente del edificio histórico acompañado, entre otros, por el arquitecto conservador del edificio, Alfonso Jiménez, explicó que en 2011 se llevará a cabo la restauración y rehabilitación de la fachada de la calle Alemanes y Placentines, en el patio de los Naranjos, "que además tiene un aspecto bastante impresentable", lamentó y que tardará "entre un año y medio o dos".

El siguiente proyecto será la restauración de la solería y el pavimento de la Capilla Real, "que va a permitir un estudio arqueológico" por lo que, apuntó Navarro, "tras su salida en agosto del próximo año, la Virgen de los Reyes estará en el sagrario hasta abril o mayo de 2012", cuando esperan que haya finalizado la obra.

Finalmente, la última de las obras, "el plato fuerte", como definió, será la restauración del Retablo Mayor de la Catedral, que no se lleva a cabo desde hace 30 años. Así, informó que confía que el proyecto, que ya está encargado, será redactado en septiembre y tendrá una duración de "un mínimo de dos años y medio", pueda comenzar "también en 2011".

El delegado ejecutivo de Administración y Patrimonio Catedral hizo estas declaraciones en una rueda de prensa en la que dio por concluida "de forma simbólica" la obra de restauración de la fachada principal de la Catedral, consecuencia de un convenio firmado entre el Cabildo y la Fundación Caja Madrid, que ha contado con un presupuesto de cerca de tres millones de euros y que se ha alargado por un periodo "de algo más de cuatro años". Además, informó que con el dinero que ha sobrado "se va a realizar una exposición que tendrá lugar el próximo otoño sobre las obras y la conservación de la Catedral", realizada por la entidad bancaria.

Las obras llevadas a cabo han consistido, entre otras actividades, en reposiciones de pináculos, gárgolas y elementos decorativos, tratamiento de la piedra, restauración de vidrieras y sustitución de sus elementos de protección, limpieza y restauración de relieves y esculturas de la Portada de la Asunción, así como de la portada de la Iglesia del Sagrario o la recuperación de los vítores de su fachada.

El convenio, en el que ha participado en su última fase una escuela taller de Forja XXI con la realización de ocho acroteras o remates de piedra para la cúpula del Sagrario, así como ocho vidrieras para la linterna de este templo, ha incluido, además, la rehabilitación completa de los archivos del palacio arzobispal, que contó con un presupuesto de algo más de un millón de euros.

Para el arquitecto conservador de la Catedral, Alfonso Jiménez, esta ha sido la obra "más larga, extensa y agradecida" de todas las que ha hecho y destacó que ha conllevado "tres resultados espectaculares" como son el cambio de color de la fachada, la ausencia de accidentes en cuatro años de obra y la adecuación del presupuesto, algo que le ha ocurrido "por primera vez" en su vida.

Las obras se han realizado por tramos, resultando dividida la longitud total en 14 tramos, condicionada por los periodos de tiempo en los que podrían situarse los andamios, en función de las celebraciones de Semana Santa, principalmente, y de los periodos de anidación y reproducción de determinadas especies protegidas, como el cernícalo primilla, que anida en los mechinales de la fachada.

Jiménez resaltó que para las obras "se ha empleado piedra y sólo piedra antigua, aunque esté labrada en el siglo XXI", como similares características a la original, pero de una mayor resistencia a la compresión y con un menor índice de porosidad.