SEVILLA, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los sindicatos ANPE, CCOO, CSI-F, FETE-UGT, SADI y USTEA han exigido este miércoles a la Consejería de Educación que, "como mínimo", mantenga las indemnizaciones por jubilación voluntaria de 2010 ya que, en este año 2011, tal y como confirmaron a Europa Press fuentes de la Administración educativa, los cerca de 3.000 profesores que se han acogido a la última convocatoria de esta jubilación anticipada van a recibir una gratificación extraordinaria de alrededor de 3.000 euros menos que en años anteriores.
En un comunicado conjunto, estas organizaciones sindicales han mostrado su "total rechazo" a esta "rebaja sustancial" de las indemnizaciones por considerarla "una falta de respeto a los miles de profesores que han dedicado su vida, en situaciones muy complejas y difíciles, a la profesión docente".
El pasado miércoles 16 de marzo, en mesa sectorial, se procedió a la revisión anual del acuerdo de 8 de julio de 2008 sobre la cuantía de estas indemnizaciones (que fue firmado por los sindicatos y por Educación) y que este año 2011 ha resultado 'a la baja' debido a que dos comunidades autónomas --Madrid y Castilla La Mancha-- han eliminado sus respectivas gratificaciones y, por tanto, la media ponderada que se hace en Andalucía para calcular esta indemnización se ha hecho sobre 12 regiones y no sobre 14, como en años pasados.
Ante ello, los citados sindicatos han exigido a Educación "un cambio de actitud, la retirada de la actual propuesta y el mantenimiento, como mínimo, de las gratificaciones vigentes en el año 2010". De lo contrario, han anunciado, realizarán "medidas de presión en los próximos días".
Asimismo, ANPE, CCOO, CSI-F, FETE-UGT, SADI y USTEA han pedido al Ministerio de Educación que "sea consecuente con sus reiteradas promesas y que cumpla la Ley Orgánica de Educación iniciando las oportunas negociaciones en seno de la Mesa Sectorial de Educación con el objetivo de prorrogar la jubilación anticipada incentivada". Sobre todo, argumentan, porque "las propias administraciones han reconocido la necesidad de la jubilación anticipada para los docentes" ya que, de un lado, sirven para "reconocer la complejidad de la profesión docente y el esfuerzo que ha tenido que realizar para actualizarse y adaptarse al continuo cambio normativo, tecnológico y social" y, de otro, es "necesaria para la renovación de las plantillas docentes a fin de dar una respuesta adecuada a los nuevos retos formativos de la ciudadanía".